El consejero de Cultura y Turismo, Pedro Alberto Cruz, visitó hoy junto al alcalde de Mula, Diego Cervantes, las obras de rehabilitación que se llevan a cabo desde el mes de abril en el convento de San Francisco.
El conjunto conventual, declarado Bien de Interés Cultural el 2 de mayo con categoría de monumento, cuenta con una superficie total construida de unos 5.000 metros cuadrados por planta, de los que 1.000 pertenecen a la iglesia. Este edificio “está destinado a ser uno de los espacios culturales más importantes de toda la Región de Murcia”, indicó Cruz, que también avanzó que, aunque no se han definido los usos que tendrá una vez finalizadas las obras, “ya hay algunas ideas sobre la mesa” que “van a singularizar a Mula como una de las grandes capitales de la cultura en la Región”. Además, “sus usos culturales se complementarán con otros turísticos”, explicó.
El Convento de San Francisco fue construido en el siglo XVI sobre el emplazamiento de una antigua ermita dedicada a la Purísima Concepción, situada a las afueras de la ciudad, junto a la Puerta de Murcia. Vinculado al Marquesado de los Vélez, este convento franciscano ejerció gran influencia en su entorno y vivió su máximo esplendor durante el siglo XVIII. Con la desamortización de Mendizábal, este inmueble pasó a desmembrarse en diversas propiedades privadas alojando usos tales como almacén de trigo, viviendas, espectáculos teatrales, comercio, pequeña industria.
Del primitivo complejo conventual, quedan dos volúmenes totalmente diferenciados: el templo del siglo XVI y el claustro. La pieza fundamental que caracteriza al edificio es el Patio de los Aljibes, en cuyo subsuelo se alojan dos depósitos de agua pluvial con sus brocales de aguada. El presupuesto inicial de las obras asciende a 2.453.894 euros, de los que la Comunidad, a través de Cultura y Turismo, financia 962.000, mientras que los ministerios de Fomento y Cultura, mediante el uno por ciento Cultural, aportan 1.481.984 euros, y el resto, 10.000 euros, el Ayuntamiento de Mula.