El problema de la contaminación en Molina de Segura ha aumentado en los últimos años debido al acusado crecimiento demográfico. En gran medida, el desarrollo económico ha tenido como indicador el auge de la construcción. Nos encontramos, en consecuencia, con un notable aumento de la generación de residuos de construcción, y el vertido en escombreras clandestinas en cualquier punto del municipio, sin considerar los daños ocasionados desde el punto de vista ecológico.
La situación se ha hecho cada vez más visible: su número es elevado y afecta a barrios, pedanías, urbanizaciones, y polígonos, zonas agrícolas y diseminados, espacios protegidos y áreas rurales por igual. Caminos y vías, así como parcelas abandonadas son utilizadas para abandonar gran diversidad de residuos mezclados, desde algunos catalogados como peligrosos (fibrocemento, envases de productos tóxicos, neumáticos) hasta escombros, muebles, vajillas, ropa, o electrodomésticos, deteriorando la imagen del municipio, y de sus parajes.
A pesar de la existencia de un punto limpio municipal gratuito, resulta habitual que personas faltas de civismo, opten por depositar su vertido en cualquier parte, conscientes de la impunidad con que lo hacen, siendo necesaria la actuación de limpieza, retirada, vigilancia y control de las administraciones públicas, la colaboración ciudadana para su denuncia, y la educación en una mayor conciencia medioambiental y social.
SOMOS REGIÓN ha instado al gobierno municipal para que INICIE DE INMEDIATO EL PROCEDIMIENTO para la limpieza y retirada de los vertederos en la avenida de Los Castaños, en la carretera del Panderón y la carretera de Las Canteras a Cabezo Blanco. Asimismo, le ha solicitado campañas efectivas de sensibilización social y educación medioambiental; y el establecimiento de más puntos de recogida de enseres y escombros en las urbanizaciones y pedanías. Todo ello sin olvidar la necesidad de mejorar los medios materiales y humanos de la Policía Local para vigilar y sancionar a los infractores, y de dotar al servicio municipal de limpieza de recursos humanos, materiales y presupuestarios necesarios para que la retirada de estos vertidos irregulares esté incluida entre sus trabajos ordinarios, sin tener que abrir procedimientos de contratación específicos para su ejecución.