Murcia, 21 ene (EFE).- La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) ha desestimado el recurso presentado por una empresa de Molina de Segura contra la sentencia que declaró improcedente el despido de una trabajadora, porque, al llevar una doble contabilidad, no se podía demostrar si las dificultades económicas por las que supuestamente atravesaba eran reales.
La sentencia del TSJ, a la que ha tenido acceso Efe, señala que el Juzgado de lo Social número Uno de Murcia, en julio pasado, declaró la improcedencia del despido y condenó a la empresa a readmitir a la despedida o a pagarle una indemnización que fijó en 34.590 euros.
Asimismo, el juez acordó poner en conocimiento de la Agencia Tributaria la existencia de la doble contabilidad "por si pudiera constituir un fraude contra la Hacienda Pública cometido por la empresa".
Al desestimar el recurso presentado por la empresa, la Sala señala que los motivos alegados de pérdidas o disminución de ventas en este negocio no han podido acreditarse al no contabilizarse los ingresos recibidos en dinero negro.
En cuanto a la doble contabilidad, indica que "se fundamenta, principalmente, en la declaración del testigo propuesto por la demandante, el cual no sólo afirma la existencia de instrucciones de la empresa para no declarar o registrar oficialmente determinados ingresos procedentes de ventas, sino que reconoció, como hechas de su puño y letra, alguna de las anotaciones".
Al desestimar su recurso, la Sala ha condenado a esta empresa a pagar 200 euros al letrado de la trabajadora en concepto de costas. EFE