El director general de Vivienda y Arquitectura, Marcos Nogueroles, y el alcalde de Molina de Segura, Eduardo Contreras, visitaron hoy las obras de acondicionamiento del espacio público del Mirador del Castillo en el municipio molinense, que cuentan con una subvención de la Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio superior a los 300.000 euros.

Esta actuación es fruto de uno de los convenios de colaboración entre la Comunidad Autónoma y los ayuntamientos para mantener las inversiones destinadas a la conservación del patrimonio histórico murciano y su entorno, y con las que, en este caso, se mejorarán el Castillo de Molina y sus alrededores, al actuar también sobre la Casa de la Maita.

El Mirador del Castillo se encuentra en el lugar que ocupaba la alcazaba del castillo, desde donde se divisaba toda la Vega del río Segura y la circulación desde el Valle de Ricote hasta Murcia cuando Molina era un importante enclave romano.

En aquella época el municipio tenía una fortificación romana que luego pasaría a ser árabe, ya desaparecida, sobre cuyas ruinas se levanta el Mirador del Castillo, “con cuya rehabilitación la Consejería pretende recuperar uno de los enclaves más destacados del patrimonio arquitectónico del municipio”, según destacó el director general en su visita.

Según Nogueroles, “la actuación prevé la remodelación de las zonas verdes del entorno del Mirador, con lo que se conseguirá mejorar no sólo la estructura arquitectónica en sí, sino todo el conjunto que comprende, con los jardines circundantes y la Casa de la Maita”.

Casa de la Maita

Obras Públicas va a rehabilitar la Casa de la Maita, adquirida en 2005 por el Ayuntamiento y situada en el histórico Barrio del Castillo de Molina de Segura. El objetivo de la Consejería es revalorizar el elemento más significativo conservado de la Molina medieval, ya que dentro de la actual edificación se conserva parte del alzado de la Torre del Homenaje de la alcazaba almohade, así como un aljibe de los siglos XVII-XVIII.

Con esto se completa la recuperación que está experimentando el barrio más antiguo de Molina, en el que se está rehabilitando el conjunto de espacios culturales próximos a la muralla árabe en la antigua fábrica de Maximino Moreno, además de la estructura de la muralla en sí; dos actuaciones importantes para los ciudadanos residentes en este municipio que verán recuperado dos de sus mayores obras arquitectónicas.

En total, la inversión del Ejecutivo autonómico en esta zona superará el millón de euros, algo que, según el director general es “una directriz política que apuesta por la rehabilitación del patrimonio arquitectónico regional, que en 2008 ha supuesto una inversión por parte de la Comunidad Autónoma superior a los ocho millones de euros”.