Escritores, artistas, autoridades y vecinos disfrutaron juntos de esta fiesta literaria
Mazarrón vivió una nueva noche mágica con la celebración de la entrega de premios del concurso de cuentos "Villa de Mazarrón – Antonio Segado del Olmo". La gala, que se celebró en el hotel Playa Grande de Puerto de Mazarrón, dio cita a lo más granado de la sociedad mazarronera y murciana. La ceremonia contó con la presencia del ganador del premio de este año, Juan Valero (de Totana), la ganadora del accésit, Teresa Núñez, el Premio Nacional de Literatura, Gustavo Martín Garzo, el poeta y crítico literario, Soren Peñalver, la periodista y viuda de Antonio Segado del Olmo, María Dolores de La Vieja, el Alcalde de Mazarrón, Ginés Campillo, y la concejala de Cultura, Educación y Turismo, María Celeste Soria; entre otras autoridades, artistas y escritores como Eloy Sánchez Rosillo, Lola Gracia, Fina Tafalla , Rafael García , el primer teniente de Alcalde, Francisco García, y el director de la Universidad Popular de Mazarrón (UPM), José María López Ballesta.
El salón de celebraciones del citado hotel se quedó pequeño ante la gran afluencia de público que este año acudió a la ceremonia, una de las más multitudinarias que se recuerdan. Juan Valero, profesor totanero a quien conocían gran parte de los presentes, se mostró profundamente agradecido por este premio y dijo sentirse "casi mazarronero, ya que aquí tengo muchos amigos desde la infancia". Además su relato, "Vladivostok", está relacionado directamente con el municipio, ya que fueron las minas de Mazarrón las que sirvieron al escritor para ambientar su cuento. También sobre minería gira la obra ganadora del accésit, "Corazón Amarillo". Su autora, la madrileña Teresa Núñez, también se mostró muy agradecida y apuntó que "me habéis abierto la puerta para ganar el primer premio".
Por su parte, el Alcalde de Mazarrón, Ginés Campillo, situó a Mazarrón en el centro de su intervención y dijo del municipio que "es un diamante en bruto del que nadie ha sabido ver donde radica su verdadero valor para sacarle brillo". Para Campillo, el concurso de cuentos "es uno de los lados de ese diamante y debemos cimentar definitivamente este certamen para que llegue más allá de las fronteras regionales, convirtiéndolo en una cita de calidad cultural para todos".
La concejala de Cultura, María Celeste Soria, abrió el acto explicando que "hacer cultura no es fácil", pero el Ayuntamiento seguirá impulsándola para que los actos que se programen desde este departamento consigan el renombre del "Villa de Mazarrón – Antonio Segado del Olmo". Un certamen literario del que dijo que "no es sólo un concurso de cuentos, sino mucho más. Es nuestro principal acto cultural alrededor del que todos los años se mueve la sociedad mazarronera".
El maestro de ceremonias y director de la UPM, José María López Ballesta, se mostró enormemente satisfecho por "lo bien que se han desarrollado este año todos los actos programados con motivo del certamen", y destacó del mismo que "obra el milagro de reunirnos en torno a la literatura". Tras la entrega de premios, la noche se cerró con una ágape en el que los asistentes pudieron degustar dulces típicos y de diseño acompañados de cava y sidra.
Un día antes, Gustavo Martín Garzo realizó la ya consolidada conferencia que supone la antesala a la entrega de premios. El ganador del Premio Nacional de Literatura y el Premio Nadal hizo una "Defensa del cuento de hadas" en la que habló de los más diversos y populares cuentos, como son "El Patito Feo", "La Cerillera", "La Cenicienta", "La Bella Durmiente" o "Las Mil y Una Noches", entre muchos otros. Su exposición estuvo salpicada de frases célebres y anécdotas de escritores tan conocidos como Edgar Allan Poe, Ovidio o G. K. Cheterston. Martín Garzó consiguió encantar a los presentes con sus palabras ya que "hemos venido al mundo a hechizar y a ser hechizados por los demás", parafraseando al citado autor británico.
Su conferencia no solo resultó ser una defensa de los cuentos infantiles, sino que además fue un consejo abierto a los presentes para que "les lean cuentos a los más pequeños cuando se van a la cama", ya que los niños se ven reflejados en estas historias y, además, "el cuento es un refugio donde el niño se queda arropado cuando se queda solo en la habitación". Martín Garzo quedó encantado con Mazarrón, "una tierra que aun no conocía", y deseó que el certamen "continúe por muchos años promoviendo el interés por los cuentos, ya que es necesario actividades como ésta, que supongan un apoyo a este género literario".