El derribo, que se suma al que este jueves se producía de una vivienda junto a los antiguos depósitos de Santa María, era una insistente petición vecinal para acabar con un foco de inseguridad

El proyecto se integra en el programa internacional 'Natur-W' que pretende la recuperación del centro histórico con soluciones basadas en la naturaleza

Fulgencio Gil Jódar, alcalde: "La iniciativa, dotada con casi cinco millones de euros, contempla la rehabilitación integral del edificio de la vieja Cárcel y la renaturalización de la zona de los antiguos depósitos del Taibilla"

El derribo de tres viviendas adosadas a la vieja Cárcel se ha iniciado este martes a primera hora de la mañana. Los trabajos previos se ejecutaban durante el horario de entrada de los alumnos de los dos centros escolares cercanos, la Casa del Niño y el Madre de Dios, dejando la intervención de maquinaria pesada para los instantes en que los pequeños ocupaban ya sus aulas.

La demolición de estas tres propiedades se suma a la ejecutada el pasado jueves de otra vivienda junto a los antiguos depósitos de los Canales del Taibilla en Santa María, dentro de un proyecto muy ambicioso que tiene como reto regenerar el área de los Barrios Altos con la rehabilitación y puesta en valor de la vieja Cárcel.

Los trabajos de derribo eran supervisados por el alcalde, Fulgencio Gil Jódar, quien ha recordado que "la iniciativa, dotada con casi cinco millones de euros, contempla la rehabilitación integral del edificio de la vieja Cárcel y la renaturalización de la zona de los antiguos depósitos del Taibilla".

Las labores hasta lograr la demolición de estos inmuebles han sido arduas. "No ha sido fácil, porque horas antes tuvimos que hacer frente a varios intentos de ocupación. De hecho, aunque estas viviendas se iban a demoler de forma inmediata, tuvieron que habilitarse con medidas para evitar que nadie se adentrara en su interior, colocando en puertas y ventanas planchas de acero. Se trata, como bien saben los vecinos, de unas propiedades que constantemente generaban problemas de inseguridad, por lo que este martes no sólo arranca un proyecto que impulsará los Barrios Altos, sino que acabamos con un 'punto negro' que requería de forma constante la presencia de agentes de la Policía Local y Nacional", ha explicado el alcalde.

El proyecto está incluido en el programa internacional 'Natur-W' que abarca también actuaciones de rehabilitación energética en viviendas sociales. En septiembre concluía la redacción de proyectos que se iniciaba en marzo pasado, con la concreción de las actuaciones a realizar. La iniciativa de mayor envergadura es la rehabilitación de la vieja Cárcel. "El proyecto 'Natur W' abordará el reto de regenerar el área urbana de los Barrios Altos y combatir la pobreza energética y el uso ineficiente de los recursos hídricos naturales a través de soluciones basadas en la naturaleza, apoyando la recuperación iniciada del conjunto histórico", ha asegurado Gil Jódar.

La iniciativa integra la primera convocatoria del programa de Acciones Urbanas Innovadoras, dentro de la Nueva Bauhaus Europea y cuenta con una financiación de 4,78 millones de euros. El proyecto se basa en la colaboración tanto a nivel nacional como internacional, siendo varias las entidades implicadas en su aplicación, que durará hasta el año 2027, contemplando colaboraciones público-privadas.

El Ayuntamiento de Lorca lidera el proyecto y será responsable de casi el 74 por ciento de toda la ejecución. Dentro del proyecto intervienen también la empresa alicantina SingularGreen, que ejecutará acciones de redacción y creación de proyectos; la statup Indfresmat, de capital español y holandés, radicada en Barcelona, y con amplia experiencia en gestión de proyectos de lucha contra el cambio climático; SBNClima, empresa burgalesa especializada en la implantación de Soluciones Basadas en la Naturaleza que gestionará la parte relativa a procesos participativos; y el Centro Unesco sobre recursos hídricos de la Universidad de Aristóteles de Tesalonica, en Grecia. Varios municipios europeos replicarán las actuaciones que se realicen en Lorca, los de Mantova, en Italia, y Fylis, en Grecia.

"La mayor parte del proyecto la ocupa la rehabilitación del Pósito Alto-vieja Cárcel. Es fundamental para la puesta en valor del recinto histórico de la Ciudad, al tratarse de uno de los últimos monumentos que quedan por recuperar después de los terremotos. Es imprescindible para recuperar la vida en el recinto histórico, en consonancia con el proyecto municipal para reconstruir los solares vacíos y rehabilitar las casas en ruina", ha especificado el alcalde.

Pero también es de suma importancia la renaturalización de los depósitos de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, situados en la zona de Santa María, "donde se creará un gran espacio libre de esparcimiento y una zona verde. Con el asesoramiento del Centro Unesco sobre recursos hídricos de la Universidad de Tesalónica se buscará introducir el ciclo del agua en la gestión urbana y edificatoria", ha añadido.

Las nuevas tecnologías llegarán a casi media docena de viviendas sociales, para lograr una gestión urbana sostenible, que mejorará la habitabilidad de estos inmuebles. "No es un proyecto futuro, como estamos viendo este martes en que se han dado los primeros pasos, con la demolición de estos tres inmuebles que se suma a un cuarto, la semana pasada. Se hará al unísono con el Plan Resurgir de la Vieja Ciudad. Es la actuación más ambiciosa ejecutada hasta el momento en el casco antiguo. El Gobierno de Lorca no sólo cree en la recuperación del casco antiguo, sino que va a lograr que el recinto histórico recupere su encanto, se llene de lorquinos y restauración y comercio vuelvan a sus calles. Nuestro esfuerzo es visible. El sábado el Boletín Oficial de la Región de Murcia daba cuenta de la reclasificación de casas en ruina afectadas por los terremotos. Marca un punto de inflexión para la recuperación del casco histórico. El esfuerzo, repito, está siendo importante, porque los costes de estas demoliciones corren a cargo del Ayuntamiento de Lorca", ha concluido Gil Jódar.

Los costes de la demolición, que financia el Ayuntamiento es de 11.434,50 euros, IVA incluido. Y el proyecto de 1.150 euros más IVA.