Sobre el papel está activado el UMBRAL DE ALERTA A LA POBLACIÓN al superarse los 150 microgramos de PM10 (partículas) por metro cúbico

El concejal de la coalición de izquierdas, Pedro Sosa, denuncia la pasividad de las autoridades ambientales, de emergencias y sanitarias del Ayuntamiento de Lorca

Lorca.8/04/2024. Hay seis categorías que miden la calidad del aire (buena, razonablemente buena, regular, desfavorable, muy desfavorable y extremadamente desfavorable). Lorca lleva desde ayer, al superar los 150 microgramos de PM10 (partículas en suspensión) por metro cúbico, inmersa en un prolongado episodio de calidad del aire "extremadamente desfavorable". Según aparece en la web del gobierno regional donde se registran datos en tiempo de real de todas las estaciones de vigilancia de la calidad del aire, la estación de Lorca es la que registra a estas horas y desde ayer los peores datos de toda la Región: 157, 5 microgramos de PM10 por m3. Cabe advertir que el valor límite establecido no puede superar los 50 microgramos, y ese dato implica más que triplicarlo.

Con esos datos debería haberse activado automáticamente el denominado "umbral de alerta a la población". Un umbral que la Ley de Calidad de Aire define en su artículo 2, 34) como: "nivel de concentración de un contaminante a partir del cual una exposición de breve duración supone un riesgo elevado para la salud humana que afecta al conjunto de la población y, que, en caso de que haya superación o previsión de que sea superado, requiere la adopción de medidas excepcionales e inmediatas por parte de las administraciones competentes".

Pedro Sosa ha comparecido esta mañana ante los medios de comunicación para denunciar la pasividad de la administración local frente a éste y otros episodios. No puede ser, afirma Sosa, que el Ayuntamiento de Lorca tenga 25 concejales y sólo uno de ellos muestre su preocupación ante un fenómeno como el que estamos padeciendo. Durante este fin de semana el Ayuntamiento de Lorca, con el Alcalde a la cabeza, seguido de los concejales de Emergencias (a cuya cabeza está un concejal de VOX; partido negacionista del cambio climático y sus efectos) de Sanidad y de Medio Ambiente deberían haber desplegado un conjunto de medidas excepcionales para evitar los efectos nocivos del episodio contaminante.

Cuando se rebasan los límites del modo en que se han rebasado en esta ocasión, el Ayuntamiento de Lorca tiene que implementar los protocolos que existen para estos casos y comunicar a la población en general, y a los grupos de riegos en particular (niños, ancianos, enfermos crónicos, enfermos del sistema respiratorio y pulmonar, deportistas, etc.) que eviten la exposición prolongada al aire libre durante los mismos. Algo que ni ha hecho ahora, ni hacen nunca. En este sentido ha acabado preguntándose para qué nos sirve tener concejales de emergencias, de medio ambiente o de sanidad, si en los momentos en los que tendrían que cumplir una función tan necesaria de servicio público a los ciudadanos de Lorca permanecen con los brazos cruzados o haciéndose fotos en las romerías habituales.

Para el edil de izquierdas los episodios de contaminación atmosférica grave se producen en Lorca cada vez más regular e intensamente. Nuestra formación política, ha recordado el concejal, parece ser la única en Lorca que se preocupa de la contaminación atmosférica y sus efectos graves en la salud de las personas: malos olores de una fábrica de elaboración de grasas animales ubicada en la carretera de Caravaca, su lucha contra la incineración de residuos tóxicos y peligrosos, la consecución de distancias mínimas a granjas porcinas, la adaptación ambiental de las instalaciones de generación de energía a través del tratamiento de los purines para evitar las olas de mal olor que recurrentemente invadían la ciudad de Lorca… son luchas abanderadas en solitario por IU.

Sosa ha urgido al Alcalde y a todos los concejales competencia en ello que se pongan a trabajar para los ciudadanos a los que deberían representar mejor. Es incomprensible, ha concluido el concejal de izquierdas, que las autoridades sanitarias y ambientales de Lorca "se pongan de lado" cada vez que se produce un fenómeno grave de contaminación en Lorca, cuando está suficientemente estudiada la repercusión de la misma en enfermedades graves de carácter cardiovascular y respiratorio, y son muchos los ciudadanos de Lorca que acuden al hospital aquejados de esas dolencias que traen causa de esa contaminación.