• Fulgencio Gil: "el alcalde de los socialistas ha provocado que venir al casco histórico sea un problema para la gente, plagado de incomodidades, cortes arbitrarios de calles y aparcamientos a los que resulta imposible llegar".
Más de 60 minutos para llegar de La Alberca al Óvalo, o para circular desde La Viña a Juan Carlos I, calles cortadas al tráfico sin aviso previo, nula presencia de agentes para regular el tráfico… un auténtico desastre para cualquier ciudadano que el pasado fin de semana tenía que circular por la práctica totalidad de calles de nuestro casco urbano. No había ni una sola zona que se librara del colapso absoluto de vehículos.
El presidente del Partido Popular de Lorca, Fulgencio Gil, ha manifestado que numerosos lorquinos nos han trasladado sus quejas ante la continua situación de bloqueo, colapso y caos en el tráfico que sufren los ciudadanos a diario y que se está viendo agravada a medida que pasan los días, alcanzado situaciones límite como la que se vivía el pasado viernes, cuando fue imposible acceder a múltiples puntos del casco urbano ante el atasco general en toda Lorca.
Gil ha subrayado que este caos ha convertido a nuestra ciudad en una ratonera, donde es imposible circular, algo que resulta particularmente desesperante para los ciudadanos que no tienen más remedio que coger sus vehículos para ir a trabajar, realizar sus estudios o regresar a sus propios domicilios. La realidad es que actualmente se tarda más tiempo en cruzar el casco urbano que en coger el coche e irse a Murcia, y luego a algunos les surge la pregunta de por qué se ha convertido en habitual que la gente no venga a Lorca, y que incluso los lorquinos prefieran irse a otros municipios.
Estamos hablando de una situación que constituye la peor imagen que puede proyectar una ciudad. Con estos atascos ¿quién va a desplazarse al centro de la ciudad, a su casco histórico, a disfrutar de su hostelería y comercio. Están expulsando a la gente, que se va cada vez en mayor número a otros sitios huyendo de incomodidades, ruidos y problemas. Y todo esto por un gobierno local que actúa a salto de mata, improvisando medidas y sin consultar con nadie.
Este colapso está provocando, además, un serio perjuicio medioambiental al disparar la contaminación acústica y las emisiones contaminantes, además de bloquear el servicio de transporte urbano, en una coyuntura como la actual en la que numerosos trabajadores y estudiantes no tienen otra salida que coger el coche para ir a Murcia porque les han dejado sin tren.
La situación diaria del tráfico es un bloqueo y atasco de Avenida Juan Carlos I, Lope Gisbert, Museo Valiente, Poeta Carlos Mellado, Avenida Santa Clara…. Todo convertido en una ratonera, ya que han acumulado todo el tráfico en óvalo de Santa Paula
Con este panorama, el Sr Mateos, en vez de planificar soluciones que agilicen la densidad del tráfico, se pone a cortar calles sin avisar absolutamente a nadie. No se pueden cerrar calles a capricho del alcalde de los socialistas, de forma arbitraria, y sin servicio de agentes regulación de la Policía Local. Vemos bien que, por cuestiones concretas, muy justificadas y en determinados momentos, se cierren al tráfico algunas zonas, pero no se puede hacer sin planificar ni ofrecer soluciones alternativas.
Fulgencio Gil ha exigido que el gobierno de Mateos se ponga a trabajar, reflexione sobre los resultados de su inoperancia y planifique bien las medidas que han de ser adoptadas para incrementar la fluidez del tráfico. Si siguen así, sólo conseguirán que la gente se vaya a otros municipios huyendo del problema que están generando.