na nueva chapuza del Sr Mateos, que genera un foco de inseguridad vial por ponerse a experimentar ocurrencias que empeoran la calle en todos los sentidos. Ha creado una trampa sobre la acera que ni contribuye a la fluidez del tráfico, ni mejora nada

La concejal de Seguridad Ciudadana en el ayuntamiento de Lorca por el Partido Popular, María Belén Pérez, ha calificado de "chapuza impresentable" la decisión impuesta de forma unilateral por el actual alcalde de recortar a la mitad la acera de la confluencia de Juan Carlos I con Musso Valiente y Alameda de Ramón y Cajal para forzar, de forma insegura e irracional, la disposición de un carril donde es evidente que no cabe.

Todos los colectivos sociales y ciudadanos teníamos claro que la remodelación de la avenida Juan Carlos I tenía que incluir la construcción de unas aceras amplias y cómodas, dando al peatón el mayor protagonismo. El objetivo de los lorquinos con el ambicioso proyecto de renovación integral fue el de subrayar el perfil comercial de nuestra principal arteria urbana, una zona por la que ahora se puede pasear en familia disfrutando de mejor iluminación y más amplitud.

Sin embargo al alcalde de Pedro Sánchez no se le ha ocurrido mejor invento que el de crear a la fuerza un tercer carril en pleno centro de esta calle algo que es, a todas luces, un despropósito improvisado, una mala idea. El Sr Mateos, que antes se autocoronaba como el rey de la participación ciudadana, ahora, no consulta a absolutamente nadie antes de ejecutar las obras, y esta ocurrencia no escapa a esa política de hechos consumados. No ha consultado a nadie para ello, y al final nos encontramos con un embudo para vehículos, y una acera partida.

María Belén Pérez ha explicado que el actual desgobierno local se ha empeñado en meter un carril para los coches donde ni cabe, ni hace falta, ni lo ha pedido nadie, señalándolo con pintura sobre la propia acera, que además han perforado y plagado de antiestéticos conos, y reduciendo a la mitad el lugar de paso de los peatones. Esto es una pifia que reclamamos que el actual alcalde rectifique cuanto antes. Cualquier ciudadano que pase por la zona y se encuentre semejante bodrio podrá comprobar en persona el disparate que ha hecho el Sr Mateos.

Belén Pérez ha manifestado que cada vez que el actual alcalde se empeña en ingeniar novedades en asuntos de los que está claro que no entiende, pasan estas cosas, y los ciudadanos terminan pagando las consecuencias de un gobierno local fallido, inoperante y fracasado. Un experimento que la gente de Lorca no se merece.

A estas alturas todos los lorquinos tienen claro que el actual gobierno local no sabe gestionar, y que sus acciones se cuentan como golpes de improvisación, equivocaciones y ocurrencias. Esto es tan evidente como que el Pedro Sánchez lorquino carece de un proyecto para Lorca, y que el municipio está hoy mucho peor que hace un año, más sucio, descuidado y desprotegido, algo que no se entiende porque ahora el ayuntamiento tiene más dinero que nunca.

Sin embargo, estamos pagando impuestos más caros cuando más está ahorrando el ayuntamiento por la suspensión de servicios y actos. Ya sabemos que esos ahorros se los están gastando, por ejemplo, en comprar coches por 800.000 euros, en vez de ayudar a la gente a superar la crisis social del COVID-19.

El Sr Mateos afirmó que si ellos gobernaban iban a convertir la avenida Juan Carlos I en una calle de sentido único, algo que también prometió el partido del actual edil de Ciudadanos, que apuntala al gobierno socialista. Cabría preguntarse qué se esconde detrás del cambio tan sorprendente y radical que comparten al respecto. ¿Mintieron entonces, o es ahora cuando están tratando de engañar a la gente? En cualquier caso, no se puede negar que los rumores sobre la coherencia del actual gobierno local han sido exagerados.

Desde el Partido Popular exigimos que se deje la calle como estaba, porque la ocurrencia que han perpetrado es mucho más insegura, no contribuye a la fluidez del tráfico y, encima, sitúa el paso de los vehículos sobre la propia acera. Parece increíble que a estas alturas el alcalde de los socialistas, el que perdió las elecciones, no se haya dado cuenta de que los experimentos, mejor hacerlos en casa y con gaseosa.