El Portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Lorca, Diego José Mateos ha lamentado que el equipo de gobierno del PP "con su dejadez, haya provocado que los vecinos de la pedanía de La Parroquia no vayan a poder disfrutar durante este verano de su piscina municipal", y por la que precisamente los propios vecinos y vecinas han estado reclamando actuaciones de mejora durante los últimos meses, para que estuviera a punto de cara al inicio de la temporada estival.
Mateos reprocha al equipo de gobierno del Partido Popular que hayan estado "perdiendo el tiempo y no hayan llegado a prever con la suficiente antelación el arreglo de lo que aseguran, impedirá que esta instalación esté lista para su utilización durante estos próximos meses de verano".
Según pudo conocer el Grupo Socialista, tras interesarse en este problema y preguntarle al propio Concejal de Deportes durante la celebración del último pleno municipal "el problema que imposibilitará la apertura de la piscina municipal de La Parroquia este verano radica en que el vaso de la misma se ha desplazado".
"Un problema considera Mateos- que resulta incomprensible que por su envergadura y gravedad no fuera detectado con la suficiente antelación como para ser atajado y solucionado a tiempo para el inicio de la presente temporada estival, pues no estamos hablando asegura-de un pequeño problema aislado".
No obstante, desde el Grupo Socialista proponen que sea la empresa constructora quien se encargue del arreglo de este desperfecto pues "todas las evidencias conocidas hasta el momento, y a la espera de que se conozcan los informes técnicos al completo, apuntan a que este problema responde a un claro ejemplo de que hayan aparición de desperfectos y vicios ocultos de la construcción de esta piscina que no han aflorado hasta que no han pasado varios años desde su terminación".
Mateos recuerda que esta piscina tuvo un coste de 310.000 euros por lo que el Ayuntamiento de Lorca, con el equipo de gobierno a la cabeza, debe requerirle a la empresa constructora que se haga cargo de las consecuencias que han provocado lo que en su momento, como ha queda claro, no hicieron bien, pese a esta importante inversión. En este sentido, el responsable socialista insiste en que "lo que tiene que hacer el equipo de gobierno del Partido Popular es reclamar a la constructora y acogerse al plazo de 10 años de garantía que existe, para que el arreglo y la solución de estos daños materiales no le cueste ni un céntimo a los lorquinos".