Ecologistas en Acción critica las declaraciones del concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Lorca, Melchor Morales, al confundr términos y minimizar el problema, llegando a afirmar que la contaminación en Lorca viene de fuera del municipio, cuando hasta ahora no se ha realizado ningún estudio ni investigación científica que avale esas afirmaciones. Lo que sí es una realidad es que desde el 2010 Ayuntamiento y Comunidad Autónoma vienen excusando su falta de iniciativas para atajar el problema del ozono troposférico, en que no saben de dónde procede dicha contaminación, y sin embargo, y a pesar de ser el caso más alarmante de toda Europa, en tres años no se ha iniciado ningún estudio serio al respecto.
Para esta organización ecologista, las declaraciones del concejal de Medio Ambiente intentan desviar la atención sobre el grave problema que el municipio tiene por contaminación atmosférica por ozono sin que el consistorio haya tomado alguna medida efectiva para averiguar el origen, ni para reducirla de una manera significativa, aunque conocía la tendencia a un empeoramiento desde el año 2010.
En el trienio 2010-12 se han superado ampliamente los días/año del valor objetivo legal para la protección de la salud de ozono que se establece en 120 microgramos por metro cúbico para la máxima diaria de las medias octohorarias, que no debe superarse 25 días por año civil (75 en total) según la legislación vigente. (Real Decreto 102/2011, de 28 de enero, relativo a la mejora de la calidad del aire). Hay que señalar que la Organización Mundial de la Salud (OMS), desde 2005, ha rebajado el valor límite recomendado para la protección de la salud de 120 a 100 microgramos por metro cúbico, en base a las evidencias científicas, por lo que, usando el valor límite de la OMS, aumentarían muchísimo más los días en que el ozono troposférico se sitúa en valores por encima de lo saludable.
Este valor no debe confundirse con los límites de alertas por altas concentraciones puntuales, que como su nombre indica son casos esporádicos. Aquí se trata del nivel de contaminación continua que sufre el municipio.
Cuando se superan los valores objetivos del trienio 2010-2012, la legislación vigente establece la obligación de que la administración regional, en coordinación con la administración local, aprobará planes de calidad del aire con el fin de conseguir respetar el valor limite (art. 24 Real Decreto 102/2011). Ecologistas reclama una mayor diligencia en la implementación y desarrollo de este plan de mejora de la calidad del aire, que debe realizarse con el concurso de todos los agentes sociales.
Es necesario además medidas de un mayor control que evite en el futuro superaciones de los valores límite de otros contaminantes como micropartículas PM10, micropartículas PM2,5, Dióxido de nitrógeno y otros contaminantes, relacionados todos ellos con el tráfico y determinadas industrias, y que recientemente ha llevado a Janez Potocnik, comisario de Medio Ambiente de la Comisión Europea, ha anunciar el endurecimiento de los límites legales de contaminación que permite a los Estados Miembro, a raíz de un nuevo estudio de la OMS que revela que la contaminación del aire daña la salud más de lo que se creía hasta ahora.
Ecologistas en Acción critica la pasividad reiterada y manifiesta del Ayuntamiento de Lorca, y el intento de minimizar lo que es un problema de salud pública y no sólo un mero incumplimiento administrativo, y les pide que salgan de su marasmo para atender este problema de deterioro de la calidad del aire en el municipio por la contaminación atmosférica, y no sólo referida al ozono troposférico.
Por ello exigen que se trabaje de forma urgente y seria en determinar las causas de la contaminación por ozono en Lorca y por tanto se tomen las decisiones que permitan atajarla, y recuerdan que no es el único contaminante sobre el que se debe actuar en el municipio.
Para terminar, la organización ha destacado que es innegable el beneficio que de cara a la calidad del aire tendría un Plan de Movilidad Sostenible, que reduciría las emisiones del tráfico a motor, además de un mayor control de las emisiones de las industrias potencialmente contaminantes.