Dentro de la programación de los Juegos Deportivos del Guadalentín son tan importantes las actividades más espectaculares como aquellas destinadas al público infantil y que hacen que los más pequeños comiencen a disfrutar con el deporte. Este último caso es el de la prueba disputada en la tarde del pasado miércoles, y que participa por segunda vez en las olimpiadas lorquinas: Jugando al Atletismo en la Calle.

40 niños y niñas de entre 6 y 12 años se dieron cita en las alamedas, alrededor de la Plaza Alcalde Fernando Chuecos, para aprender un poco más sobre atletismo gracias a divertidos juegos de iniciación que les permitieron conocer cinco pruebas deportivas.

El circuito comenzaba con la prueba del salto, haciéndolo con los pies juntos para llegar lo más lejos posible. Después los peques se probaron en el lanzamiento de peso, tirando lo más lejos posible una pelota de goma. La tercera prueba también era de lanzamiento, pero en este caso una jabalina, que tenía avanzar la máxima longitud. Y por último la velocidad por partida doble: por un lado saltando cinco vallas bajas para recorrer después 30 metros a la máxima velocidad.

Como no podía ser de otra forma, los jóvenes se lo pasaron en grande disfrutando del deporte al aire libre y aprendiendo en cada una de las pruebas la forma de hacerlo mejor, gracias a los consejos de los monitores. Y al final del recorrido, todos tuvieron su justa recompensa: una mochila para dar sus primeros pasos por el mundo del atletismo, una libreta para apuntar sus marcas y una bolsa de chucherías y un zumo para recuperar las fuerzas tras el circuito atlético.

Fue una forma muy divertida de pasar la tarde y con muy buena acogida por los participantes, pues se lo pasaron en grande y anunciaron que el próximo año estarían en la tercera edición de Jugando al Atletismo en la Calle. Así pues, gracias a esta iniciativa de la Asociación Deportiva Eliocroca y los Juegos Deportivos del Guadalentín, los más pequeños tuvieron la mejor oportunidad para participar y disfrutar con las olimpiadas lorquinas que vuelven a demostrar que son para todo el mundo.