Lorca, 4 feb (EFE).- La organización Cáritas Interparroquial en Lorca hizo hoy un llamamiento para la donación de ropa de abrigo para bebés y para niños en edad escolar, al haber agotado en su ropero solidario toda la ropa para menores porque la demanda se ha cuadruplicado.

Un portavoz de Cáritas explicó a Efe que mientras se mantiene el índice de donaciones de ropa para desfavorecidos se multiplican las peticiones, hecho que atribuyó a las bajas temperaturas registradas este invierno y a los efectos de la crisis económica.

Según indicó, si no se realizan nuevas donaciones, la ropa infantil del ropero solidario "se agotará en unas 48 horas", porque cada semana 60 niños y bebés pertenecientes a familias desfavorecidas residentes en Lorca reciben prendas de este almacén, aunque la misma persona sólo puede recoger ropa cada 90 días.

Durante todo el año 2008 Cáritas realizó 4.331 entregas de ropa a personas sin recursos, el doble de las registradas en 2006 y 1.300 más que en 2007, a través de su servicio de ropero solidario, que se nutre de donaciones de particulares.

Los particulares pueden realizar las donaciones de ropa en la sede del ropero de la calle Villaescusa de Lorca los lunes, miércoles y jueves en horario de 18 a 20 horas y la recogida solo se realiza los martes y viernes.

Una vez que llegan al ropero de Cáritas las prendas superan un control de calidad y sólo se destinan a la donación aquellas que se encuentran en buen estado, mientras que el resto se destina al reciclaje.

En el ropero de la ONG trabajan por turnos varias decenas de voluntarios encargados de clasificar, reparar y planchar las prendas que pueden ser retiradas por las personas que las necesiten los martes y los viernes por la tarde.

Los mayores receptores de ropa son los miembros de la colonia de inmigrantes ecuatorianos y marroquíes que residen en el municipio y cada uno de ellos sólo recibe ropa dos veces por temporada.

El ropero de Cáritas cuenta además con un control informatizado de los receptores de ropa, cuyos datos y la fecha en la que le fueron entregadas las prendas quedan archivados en un fichero que ya incluye más de 15.000 registros.

Los particulares no sólo entregan prendas de ropa sino también cochecitos de niño, zapatos, sábanas y mantas. EFE