Lorca, 12 ene (EFE).- El ministerio de Economía ha solicitado al ayuntamiento de Lorca que reduzca un 40 por ciento su presupuesto previsto para 2009 dada su situación de endeudamiento, que exige, por ley, la aplicación de un plan de saneamiento financiero que debe aprobar el Gobierno de España.

Lo confirmó hoy el concejal de Economía y Hacienda, Antonio Ibarra, que explicó que el ayuntamiento se ha visto obligado a prorrogar el presupuesto municipal del ejercicio 2008 ante la imposibilidad de aprobar el de 2009 hasta que el ministerio no de el visto bueno al plan de saneamiento.

Consideró que la exigencia ministerial de que el presupuesto local sea reducido en un 40 por ciento es inviable "y un auténtico disparate", aunque precisó que el consistorio ya había previsto una reducción de entre el 15 y el 20 por ciento para 2009, respecto al presupuesto municipal de 2008, aún en vigor, que ascendía a 127'5 millones de euros.

Pese a ello, el edil del PP se mostró confiado en que el plan de saneamiento sea aprobado por la dirección general de Coordinación Territorial de Haciendas Locales, dependiente del ministerio de Economía, durante los próximos 15 días.

Una vez que el plan de saneamiento financiero a tres años reciba luz verde, el consistorio procederá a la aprobación del presupuesto municipal para 2009, en cuya elaboración se trabaja desde el mes de agosto.

Ibarra recordó que el consistorio está obligado por la Ley General de Estabilidad Presupuestaria a poner en marcha el plan de saneamiento ante su situación de déficit económico.

El plan que fue remitido al ministerio de Economía en julio de 2008 y, cuando sea aprobado, permitirá al ayuntamiento realizar una previsión trienal de gastos e ingresos, mejorar el sistema de recaudación evitando que prescriban las deudas tributarias, eliminar los gastos superfluos, buscar fuentes de financiación en otras administraciones y de prestación de servicios en el sector privado.

El plan municipal incluye entre sus objetivos la elaboración de presupuestos más ajustados a la realidad del ciclo económico y destinar los ingresos no periódicos derivados de construcciones o instalaciones en suelo no urbanizable, preferentemente a inversiones o a la reducción del endeudamiento.

Asimismo, incluye otras medidas de aplicación como racionalizar el gasto corriente modificando la gestión o la estructura de los servicios municipales para conseguir ahorro de costes sin menoscabo de la calidad de los servicios.

También incluye la puesta en marcha de procedimientos que permitan un control eficaz de la gestión de compras, bienes o servicios, la instauración de elementos de evaluación técnica y económica de los servicios y el hecho de que la financiación de los gastos de inversión se apoye en el ahorro neto generado o en las aportaciones de otras administraciones.

Para la puesta en marcha del plan de saneamiento, su seguimiento y control, una vez que sea aprobado por el Gobierno, se creará un órgano colegiado específico, que tendrá carácter ejecutivo y que estará integrado por el concejal de Hacienda, el interventor del consistorio, y tres funcionarios del área contable, de personal y de presupuestos.

Las tareas del órgano de control serán la emisión de un informe trimestral sobre el estado de desarrollo y aplicación del plan y proponer medidas de corrección.EFE