Uno de los más grandes desafíos que se marca actualmente una Administración pública tan cercana y directa como puede ser un ayuntamiento es poner en funcionamiento vías de participación ciudadana acordes con las líneas de actuación abierta de gobierno día a día más transparentes.
Cada vez son más las Corporaciones Locales que van cumpliendo con ese reto enfocado a vertebrar un modelo participativo de alcance vecinal para lograr una continua y sistemática gestión de la "cosa pública".
Y es que ejecutar la democracia no debe suponer sólo para el ciudadano depositar su voto en una urna cada cuatro años sino que hay que activar mecanismos precisos e idóneos para articular un sistema de relaciones cada vez más estables y eficaces.
Estamos en sí ante un compromiso de incrementar la capacidad de rendir cuentas y de lograr una mayor implicación de los vecinos bien en la labor de gestión municipal bien en la estrategia a servir para la toma de decisiones.
En un doble frente. Por un lado, en lo tocante a transparencia, para permitir que el ciudadano acceda a la información sobre las tareas de gobierno de su ayuntamiento, sus bases de datos, sus proyectos, planes y propuestas de gestión, para consolidar sus índices de confianza,... Por otra parte, en la participación ciudadana cuando de desarrollo, ejecución y análisis de la labor pública se trate, lo que hará que los ayuntamientos se beneficien de los conocimientos, experiencias, ideas y sugerencias de los vecinos y de esta manera responder mejor a sus necesidades y demandas.
En este sentido, hay iniciativas pioneras a lo largo y ancho de la geografía nacional como la que, a través de las webs municipales como botón de muestra, los vecinos pueden elegir qué obras, servicios y actuaciones en diversas áreas de gestión local acometer y para las que el Consistorio correspondiente establecerá la dotación económica necesaria para su viabilidad y fijada previamente en unos presupuestos participativos-.
Es articular proyectos prestos a ejecutarse para el bienestar de la vida cotidiana de los vecinos porque no en vano son ellos los que formulan las propuestas y que serían votadas atendiendo, por ejemplo, al apoyo de herramientas tecnológicas de software libre.
En una palabra, una iniciativa inmensamente llamativa e interesante la de los presupuestos participativos que demuestran que los ayuntamientos españoles son capaces de hacerlo y saben hacerlo.
Juan José Ruiz Moñino.