Jumilla ha acogido la celebración de unas jornadas técnicas sobre ‘Idoneidad del EMAS para la industria vitivinícola de la Región de Murcia y ayudas para su aplicación”. En el acto de presentación han participado el Alcalde de Jumilla Francisco Abellán y el director general de Planificación, Evaluación y Control Ambiental Francisco José Espejo
A las jornadas han asistido viticultores de la Denominación de Origen (D.O) de Jumilla y Yecla, bodegueros y empresarios del sector, así como distintos responsables políticos de ambas ciudades. Los ponentes y técnicos participantes han informado sobre el procedimiento de inscripción en el Registro EMAS, de las autorizaciones de vertido a cauce público (trámite imprescindible para la obtención del EMAS), de las ayudas anuales para su implantación y otras ayudas de interés para el sector, así como de las ventajas competitivas de la inscripción en el citado registro.
Francisco Abellán ha destacado la importancia de estas jornadas para el sector, puesto que trasladan una información sobre el sistema EMAS y sus ventajas tales como la mejora de la empresa u organización, la comunicación pública de sus progresos a través de una Declaración Medioambiental, en la que quedan reflejados todos sus esfuerzos, la mejora en el control y optimización del consumo de materias primas y energía, reduciendo la producción de residuos, vertidos y emisiones y favoreciendo el uso de energías renovables. Es un sistema comunitario de gestión que permite a las empresas asegurar un alto nivel de protección del Medio Ambiente, mejorar continuamente su comportamiento medioambiental y obtener ventajas competitivas de estas mejorías
El EMAS es, según Francisco José Espejo “un sistema moderno, transparente y participativo, se puso en marcha en 1995 para aquellas organizaciones que, de forma voluntaria, desean evaluar y mejorar su comportamiento en esta materia”.
Actualmente hay 18 empresas de la Región de Murcia inscritas en el Registro EMAS, pertenecientes a diferentes sectores: alojamientos turísticos, servicios, laboratorios, consultoría y agroalimentación, entre otros. Al obtener esta certificación, señala Espejo, estas empresas “se comprometen a trabajar por el desarrollo sostenible en beneficio de las generaciones futuras”.
El EMAS tiene otros aspectos positivos, como reducir gastos en concepto de transporte, almacenaje y embalaje, disminuir el riesgo de accidentes y, por tanto, los costes derivados y el incremento de la formación de los trabajadores. Supone una política activa frente a la legislación existente y futuras regulaciones medioambientales que puedan afectar a la empresa.
Las jornadas, que se desarrollaron en el aula de cultura de Caja Murcia, fueron organizadas por la Dirección General de Planificación, Evaluación y Control Ambiental y el Ayuntamiento de Jumilla, con la colaboración de la agencia de Desarrollo del ayuntamiento jumillano, la Dirección General de Industrias y Asociacionismo Agrario de la Consejería de Agricultura y Agua, el Ministerio de Medio Ambiente, la Confederación Hidrográfica del Segura y Grama Proyectos Integrales.