El experto en comunicación y expresión de la Fundación Casaverde, Julio García Gómez, revela las claves de la felicitación

Elegir un lugar clave como este del Pueblo Ejemplar de Valdesoto en Asturias, nos está queriendo decir en esta postal navideña de la Casa Real Española, que se huye del boato y la pompa de otras felicitaciones navideñas, fuera del oropel y la tradición más ancestral de algún lugar repleto de simbolismo anacrónico. La composición fotográfica es en sí un mensaje institucional de "aquí estamos la reina y yo, Leonor y Sofía, como personas cercanas al ciudadano".

Ante los últimos acontecimientos marcados por la polémica del vídeo de presentación y las memorias de Juan Carlos I, hay una estrategia de comunicación muy estudiada para la cercanía y la proximidad a los españoles, con transcendencia y "efecto espejo" a otras monarquías europeas. El plan de comunicación que se podría haber gestionado para difundir la postal en la web oficial se centraría en los siguientes aspectos:

El escenario más neutral y positivo en plena naturaleza con la sencillez de un fondo con árboles y un pequeño muro para dar la sensación al unísono de campo y personas.

Composición asimétrica para no dar lugar a la especulación de los analistas de lenguaje no verbal de si hay una inclinación más hacia una hija que hacia otra.

Sonrisa amplia y sonrisa media para que la imagen cale con facilidad. Sonrisa muy abierta en Sofía en señal de proximidad, sonrisa media en Felipe, más abierta en Leonor y muy corta o media en el caso de Leonor.

Posición de manos y postura de pies descansando sobre el suelo lleno de hojas, es el contacto vivo con la naturaleza que va desde como Felipe sujeta por la cintura a Sofía en señal de protección paterna, las manos entrelazadas de Leticia que muestran algo de tensión y el brazo izquierdo de Leonor que descansa con naturalidad sobre el pequeño muro.

La iluminación envuelve con un halo de felicidad a los miembros, y a la vez traspasa el objetivo de la cámara para conseguir que brillen las figuras y rostro de los miembros de la Familia Real de la manera más efectiva.

Un último detalle que nos da una clave de cercanía a las personas, es la casa que se ve al fondo, a la derecha de la imagen, como queriendo mostrarnos que cada día es más importante que no se vacíen nuestros pueblos y se apoye a las gentes que quieren vivir alejadas de las ciudades.

Julio García Gómez es analista de comunicación de la Fundación Casaverde.