CSIT UNIÓN PROFESIONAL ha tenido conocimiento, a través de los profesionales, de la puesta en marcha de un pilotaje por parte de la Gerencia de Atención Primaria del SERMAS que, ante demoras superiores a 3 días para obtener cita con el médico titular (médico de familia o pediatra), permite que el sistema de citación asigne al paciente cita con otro profesional del mismo centro con menor tiempo de espera, aunque su médico titular se encuentre presente en el mismo.
Desde CSIT UNIÓN PROFESIONAL queremos informar y alertar sobre las graves consecuencias que la futura implantación de una medida de este tipo podría suponer para la Atención Primaria y para los profesionales sanitarios:
Ruptura de la longitudinalidad. La atención continuada por el mismo médico es un elemento clave que ha demostrado sobradamente que mejora la salud y la supervivencia de los pacientes, reduce hospitalizaciones y pruebas innecesarias, incrementa la satisfacción y optimiza el uso de recursos sanitarios. El pilotaje propuesto vulnera este principio, comprometiendo la calidad de la atención, la seguridad del paciente y la confianza en el sistema.
Riesgo de doble consulta. La medida no satisface la demanda del paciente de ser atendido por su médico habitual, generando en la mayoría de los casos una doble consulta: una inicial con otro profesional y otra posterior con su médico titular, lo que aumenta la presión asistencial y agrava la saturación del sistema.
Sobrecarga y saturación de agendas. La medida provoca la sobrecarga y saturación de las agendas de otros profesionales, aumentando el tiempo de espera para los pacientes asignados a esos médicos. Esto no solo empeora la accesibilidad, sino que genera tensiones en los equipos y deteriora la organización interna tanto de los médicos como del resto de categorías, porque, cuando la resolución del problema de salud requiere la intervención de otros profesionales del centro, la carga de trabajo se amplía aún más, incrementando la presión sobre todo el equipo asistencial.
Medida cosmética que no resuelve el problema. El objetivo real parece ser maquillar las cifras para aparentar que cualquier paciente puede conseguir cita en menos de 3 días, algo que no se ajusta a la realidad con la dotación actual de las plantillas de los centros de salud. No se mejora la capacidad real del sistema, no se garantiza la atención con el médico habitual y se incrementa la carga administrativa y asistencial.
Sobrecarga y falta de soluciones estructurales. La Gerencia ha optado por sobrecargar aún más a los profesionales que ya trabajan al límite, en lugar de adoptar medidas que realmente mejoren sus condiciones laborales y consigan que la AP de Madrid resulte más atractiva para otros profesionales que actualmente ni se plantean trabajar en ella.
Impacto en la motivación profesional. Esta medida añade cargas de trabajo y aumenta el riesgo de burnout. Además, se ignora la verdadera solución, que pasa principalmente por incrementar la plantilla y mejorar las condiciones laborales.
Fracaso de las soluciones previas. Los módulos de absorción surgieron precisamente en mayo de 2023 como una herramienta de apoyo temporal y voluntaria para dar respuesta a la demanda excedente y atender a la población que deseaba esperar a la primera cita disponible en la agenda de su médico titular. La Gerencia muestra reticencia por su coste económico y tampoco ha logrado aumentar la plantilla estructural, que es la única vía para garantizar accesibilidad y calidad.
Falta de diálogo y transparencia. Este tipo de cambios organizativos, que tienen repercusión directa en las condiciones laborales y profesionales de los trabajadores de Atención Primaria, deben informarse previamente a las organizaciones sindicales, responsables de garantizar dichas condiciones. En este caso no se ha informado a las mismas, lo que consideramos una grave falta de transparencia y participación.
Desde CSIT UNIÓN PROFESIONAL consideramos que este pilotaje es cortoplacista y contraproducente. La implantación de una medida de este tipo, a medio y largo plazo, va a empeorar la accesibilidad real, dañará la longitudinalidad y la confianza del paciente y reducirá la motivación y la retención de profesionales.
Por todo ello, CSIT UNIÓN PROFESIONAL reclama a la Consejería y a la Gerencia de AP de Madrid:
• Un plan real e integral de mejora de la AP en Madrid que incluya, entre otras, medidas para aumentar las plantillas de todas las categorías, especialmente la de médicos de familia y pediatras.• Mejoras en las condiciones laborales que permitan garantizar la atención con el médico asignado.• Transparencia en los datos y abandono de medidas que solo buscan maquillar cifras.
CSIT UNIÓN PROFESIONAL seguirá defendiendo los valores de la Atención Primaria y la dignidad de los profesionales sanitarios.