Se han instalado 200 cajas nido para páridos, 14 para rapaces nocturnas y 89 refugios para murciélagos fisurícolas.
Se trata de una medida desarrollada sobre las especies objetivo en las fincas incluidas en el proyecto y en su entorno inmediato, que persigue la mejora de la biodiversidad asociada a las parcelas, y cuyos primeros resultados ya se han observado con la ocupación por parte de carboneros y cernícalos de algunas cajas nido.
En el marco del proyecto AgriConCiencia[1] se han instalado diferentes refugios en los agro-sistemas objeto de actuación del proyecto, tales como cultivos de cítricos, cebada, secano y hortícolas. Tras la realización de censos previos para conocer la comunidad de aves del entorno, se han instalado cajas nido para diferentes especies de aves cuyas poblaciones se encuentran en declive y que se pueden ver altamente beneficiadas por la disponibilidad de este tipo de infraestructuras.
Los diferentes modelos instalados pretenden dar cobijo a especies cuya dieta se basa en el consumo de roedores, como la lechuza o el mochuelo, y a especies de dieta insectívora, como carraca, abubilla, carbonero común o murciélagos fisurícolas (murciélago enano, murciélago de borde claro y murciélago de Cabrera).
Existen estudios que muestran el efecto del carbonero común (un párido) como controlador de plagas de orugas, especialmente orugas defoliadoras de lepidópteros, llegando a consumir una pareja en cada temporada de cría unas 50.000 orugas. También se ha demostrado que una hembra de murciélago enano durante la lactancia puede consumir entre 1.000 y 3.000 mosquitos/noche. Por su parte, una lechuza es capaz de comer entre 1 y 3 roedores/noche, por lo que una pareja reproductora caza 16-18 roedores/noche.
Estas Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN) resultan de gran interés en los agro-sistemas de la cuenca del Mar Menor al potenciar múltiples servicios ecosistémicos como el control de plagas, lo que permite reducir el uso de pesticidas. Estas medidas ayudan además a regenerar el equilibrio natural, aportando beneficios para la salud pública y la sanidad vegetal.
Finalmente, destacar que durante esta primavera se ha registrado la ocupación con éxito por parte de carboneros (Parus major) y cernícalos (Falco tinnunculus), lo que manifiesta la eficacia de estos refugios.
AgriConCiencia cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de la Convocatoria de ayudas para la restauración y mejora ambiental en el ámbito agrícola, para contribuir a la recuperación de la funcionalidad ecológica del Mar Menor.