Indigo Estudio es un estudio de diseño gráfico con base en Mallorca y operativa global, que nació del deseo de hacer las cosas con criterio, pero sin perder el toque humano y creativo. Fundado por un diseñador mallorquín, el estudio trabaja activamente en proyectos tanto en España como en Bali, mezclando profesionalidad y frescura visual. Más que una agencia al uso, funciona como un laboratorio de ideas donde cada encargo es una excusa para combinar estrategia, intuición y una buena dosis de diseño con carácter. Además del trabajo en branding, diseño editorial y comunicación visual, también desarrolla proyectos de diseño web adaptados a cada cliente y plataforma. Su propuesta se centra en crear piezas que no solo comuniquen, sino que también dejen huella, aunque sea una pequeña sacudida visual.
En Indigo Estudio, cada proyecto es una pequeña declaración de intenciones con doble fondo. El objetivo no es seguir tendencias, sino construir identidades visuales que funcionen hoy, mañana y, si hace falta, también el año que viene. El proceso de trabajo combina pensamiento estratégico, investigación visual y ejecución precisa. Todo con una estética cuidada que evita lo previsible y apuesta por soluciones con alma. Porque cuando se hace bien, el diseño también puede levantar sonrisas (o cejas).
Desde Mallorca y Bali, Indigo Estudio trabaja en remoto con marcas de todo el mundo, con una fuerte presencia de clientes en distintas comunidades de España. La tecnología permite mantener una relación fluida y cercana, sin importar el huso horario ni la ubicación. A lo largo de su trayectoria, ha desarrollado proyectos para marcas como Netflix o Amazon Prime Video, y ha recibido menciones en medios del sector creativo por su enfoque visual y metodología de trabajo. Y aunque siempre hay quien tiene un “primo Manolo” que “sabe usar Photoshop” o una plantilla de Canva lista para salir del paso, trabajar con un estudio profesional aporta una diferencia tangible: coherencia visual, estrategia, experiencia y resultados que no necesitan explicarse. Todo esto, con presupuestos ajustados a las necesidades de cada proyecto y sin perder de vista la calidad.
Su presencia digital, visible en la web indigoestudio, en Instagram @indigoestudio y también en LinkedIn, funciona como una ventana a su universo visual: claro, versátil y pensado al detalle. Si se desea seguir de cerca su trabajo o conocer nuevas colaboraciones, basta con seguirlos en sus redes.
El enfoque de Indigo Estudio no sigue un manual prefijado. Se adapta, se transforma y, sobre todo, propone. Cada proyecto es una oportunidad para crear algo que funcione y, al mismo tiempo, sorprenda. Porque el diseño no está solo para verse bonito: también está para hacer pensar, emocionar y dejar claro que otra forma de comunicar es posible.