Con una potencia de 496 megavatios, es uno de los dos primeros parques eólicos marinos operativos en Francia y dará servicio a cerca de 1 millón de personas en la región de Bretaña
El parque ha contado con la participación de más de 150 empresas europeas, de ellas 60 españolas, incluyendo a Navantia-Windar y Siemens Gamesa
Saint Brieuc es una prueba de la capacidad de Iberdrola para abordar con éxito retos constructivos (suelo marino de basalto de gran dureza), de la cadena de suministro, medioambientales y sociales
El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha manifestado: "Este proyecto sienta las bases del sector eólico marino en Francia y demuestra el potencial de esta tecnología para impulsar la autonomía energética, la competitividad y la reindustrialización de Europa, contribuyendo además a los objetivos climáticos, en línea con el informe Draghi"
Iberdrola ha inaugurado esta mañana en Bretaña el parque eólico de Saint-Brieuc en Francia, uno de los dos primeros del país, con 496 MW de capacidad y una producción anual de 2 millones de megavatios hora (MWh). Ello permitirá dar energía segura, autóctona y libre de emisiones a cerca de un millón de personas.
Con una inversión de 2.400 millones de euros, el proyecto comenzó a desarrollarse en 2012 y ha entrado en plena operación en 2024 tras tres años de construcción. Está compuesto por 62 turbinas de 8 MW cada una, las más potentes instaladas en Francia hasta la fecha.
Los trabajos de construcción han generado más de 1.700 empleos, de los que 500 son locales, y han contado con la participación de empresas punteras como Siemens-Gamesa (encargada de la fabricación de los aerogeneradores), el consorcio Navantia Windar (cimentaciones y piezas de transición), Haizea (torres), Prysmian (cableado) o Van Oord (instalación). En total, han participado más de 150 compañías europeas, de las que 60 son españolas.
El parque de Saint Brieuc supone además un fuerte impulso para la industria eólica marina en Francia, ya que para su construcción se han puesto en marcha una nueva fábrica de aerogeneradores en Le Havre, de Siemens Gamesa, y otra en Brest, de Navantia-Windar, dedicada a las cimentaciones.
El parque de Saint Brieuc ha demostrado las capacidades de Iberdrola en la tecnología eólica marina, tanto para encontrar soluciones técnicas a los retos que supuso la dureza del suelo marino (compuesto por roca basáltica) y las grandes mareas de la zona como para movilizar la cadena de suministro.
Liderando la eólica marina en el mundo
Saint Brieuc es el cuarto parque eólico marino en operación de Iberdrola, tras los de West of Duddon Sands (R. Unido), ubicado en el mar de Irlanda; Wikinger (Alemania), en el mar Báltico, y East Anglia One (Reino Unido), uno de los parques eólicos marinos más grandes del mundo, situado en el mar del Norte.
Además, la compañía tiene otros cuatro parques en construcción: en 2025 entrarán en funcionamiento Baltic Eagle, en Alemania, y Vineyard Wind One (que será el primero a gran escala de los Estados Unidos); y en 2026 se pondrán en operación East Anglia Three (Reino Unido) y Windanker (Alemania).
La inversión en los parques operativos y en construcción supone ya 15.000 millones de euros.
Además, en el último mes, Iberdrola se ha adjudicado dos nuevos proyectos: East Anglia Two, en el Reino Unido; y New England Wind 1, en el estado de Massachusetts (EE.UU.).
Una vez concluidos, la inversión total del grupo en eólica marina superará los 25.000 millones de euros.
Finalmente, la compañía cuenta con derechos de lecho marino asegurados para futuros parques en el Reino Unido, Europa Continental, los Estados Unidos, Australia o Japón.
Iberdrola en Francia
Además, de este nuevo parque eólico marino, Iberdrola opera 11 proyectos eólicos terrestres en Francia y cuenta con una cartera de proyectos eólicos y fotovoltaicos en distintas fases de desarrollo. La compañía tiene oficinas en París, Lyon, Nantes, Nancy, Burdeos, Limoges y Marsella, además de instalaciones de operación y mantenimiento para sus distintos activos, como la de Saint Brieuc.