La demanda de protección cualificada es una necesidad transversal en cualquier comunidad y país. Por esta razón, se ha convertido en uno de los requerimientos más importantes de la actividad empresarial, generando miles de empleos y mejorando la calidad de vida de trabajadores y personal operativo. Solo en España, existen aproximadamente 1.400 empresas de seguridad privada en las que trabajan alrededor de 140.000 vigilantes de seguridad y cerca de 1.846 supervisores de material explosivo. A pesar de que la mayoría de las empresas de este sector funcionan bajo la modalidad de Pyme, su labor es de vital importancia, ya que la vigilancia privada recoge a los profesionales de inspección de entidades tan importantes como los aeropuertos, hospitales y entes gubernamentales.
Para la Escuela Superior de Seguridad, este panorama demuestra el enorme potencial que existe en este sector para formarse y crecer profesionalmente. Razón por la cual se ha enfocado en diseñar una oferta educativa de calidad, para que las personas puedan acceder a contenidos actualizados y de acuerdo a las necesidades de educación de los cuerpos y fuerzas de seguridad privada. Por sus aulas han pasado más de 30.000 estudiantes, quienes han asegurado su futuro profesional. Esto gracias al empeño y dedicación con el que docentes, administrativos y directivos lideran esta escuela.
Trayectoria e innovación
En el año de 1995, la Escuela Superior de Seguridad abrió por primera vez las puertas de su sede para recibir a un pequeño grupo de estudiantes interesados en forjar su proyecto de vida en el sector de la seguridad privada. Con el tiempo, este grupo se fue ampliando hasta alcanzar un gran número de personas que, hoy en día, agradecen los conocimientos adquiridos durante su proceso formativo. Además, invitan a las nuevas generaciones a unirse a la escuela, teniendo en cuenta el enfoque de educación integral con el que se abordan cada una de sus clases. Desde hace más de 28 años, la escuela se encuentra acreditada por el Ministerio de Educación y Formación Profesional de España. Esto la convierte en una de las primeras instituciones educativas en impartir programas de educación superior de carácter profesional a personas interesadas en el cuidado y salvaguarda de entornos en peligro.
En 2015, la escuela firmó un convenio con la Universidad de La Laguna y el Instituto Max Weber que le permitió posicionarse como una de las primeras escuelas en Canarias en proporcionar educación universitaria especializada en convivencia y bienestar. Sus programas de dirección integral de vigilancia y de investigación privada, fueron de los primeros en proporcionar a los egresados un título universitario que les permitiera acceder a mejores oportunidades laborales e incluso crear sus propios proyectos productivos dentro del sector. El curso de director de seguridad es uno de los más populares dentro de la escuela. De hecho, es de los pocos que se interesan por profesionalizar la labor en esta área, ofreciendo a los estudiantes herramientas para aprender a controlar y gestionar de forma efectiva procesos de salvaguarda. Siempre teniendo en cuenta variables como el contexto social, las necesidades específicas de protección, el diseño de matrices de proceso, auditorías, etc. Los estudiantes pueden elegir entre una formación enfocada a la seguridad integral o una especializada en la protección para el turismo, teniendo en cuenta el inmenso potencial en esta área y su necesidad de planes de salvaguarda con un enfoque diferencial.
Programas de formación profesional
Para los que buscan una formación profesional como detectives privados, la Escuela Superior de Seguridad ofrece un programa completo que se especializa en proporcionar herramientas y conocimientos sólidos de carácter científico para el correcto desempeño de los investigadores en diferentes áreas del conocimiento. Cada una de las asignaturas aborda enfoques metodológicos innovadores. Para ello, se tiene en cuenta un panorama interdisciplinar que toma como insumo teorías de áreas cercanas a la criminalística y a las ciencias forenses, tales como el derecho penal, la criminología, la psicología cognitiva y los estudios sociales. Todo esto para formar profesionales cualificados que sean capaces de asumir el liderazgo de casos de toda índole, desde un punto de vista imparcial, objetivo y transparente.
Tanto el programa de investigación privada como el de dirección de seguridad se articulan a las exigencias curriculares dispuestas por el Ministerio del Interior y la Secretaría de Estado Judicial. Asimismo se rigen bajo los estándares de las metodologías diseñadas por la Escuela para la correcta aprehensión de los contenidos. Estos dos programas cuentan con un esquema de formación online que le permite al estudiante iniciar y continuar su proceso educativo, considerando sus necesidades particulares y su disponibilidad de tiempo.
La Escuela Superior de Seguridad espera mantener su liderazgo como institución educativa para el cuidado y el bienestar, ofreciendo programas especializados en seguridad privada y pública, respaldados por sus más de 33.000 egresados y sus casi 30 años de trayectoria.