La incontinencia urinaria nocturna o “mojar la cama” en términos coloquiales es conocida como la pérdida de control de la vejiga en las noches de sueño. Esta micción involuntaria es muy común en los niños de 5 años o menores y no está relacionada con alguna afección o problema médico severo. Por el contrario, la mayoría de los niños experimentan esto durante su etapa de crecimiento incluso hasta los 7 años o más por diferentes factores. Dr. Daniel Cabezalí, especialista en urología pediátrica e incontinencia urinaria, asesora a los padres acerca del tema y les ofrece sus servicios profesionales para tratarlo con eficacia.
¿Por qué ocurre la incontinencia urinaria nocturna?
No existe una causa específica y certera por la que ocurre la incontinencia urinaria, pero sí diferentes circunstancias que llevan al niño a hacer pis en la cama. Una de estas circunstancias es que tenga una vejiga poco desarrollada, la cual le impida almacenar toda la orina que genera en la noche. Otra circunstancia es contar con un sueño profundo y, además, no tener los nervios de la vejiga completamente desarrollados para avisar que está llena.
La incontinencia urinaria nocturna también ocurre por un desequilibrio hormonal, infecciones en las vías urinarias, apnea del sueño, diabetes o estreñimiento. Además de esto, muchos niños mojan la cama cuando se encuentran en situaciones estresantes o ansiosas como las noticias de un nuevo hermanito o el inicio de la escuela. Otros pequeños pasan por esto sí sufren de hiperactividad o del trastorno de déficit de atención. Ambas condiciones son disparadores de sensaciones fuertes e impulsos inconscientes.
¿Cuándo es necesario consultar con un urólogo pediátrico?
Hasta los 7 años es muy normal que los niños mojen la cama, pero pasada esta edad es importante que los padres tengan en cuenta la continuidad de la situación y visiten a un especialista. También es fundamental llevar a un hijo ante un urólogo pediátrico si este se hace pis incluso después de estar meses seco. Otro motivo para acudir con un profesional es si el pequeño siente dolor al orinar, tiene sed constantemente, sufre de ronquidos, defeca heces duras o el color de su orina es diferente. Este tipo de elementos pueden ser alarmas claras de que existe un problema de diabetes o cualquier tipo de afección en el sistema urinario o nervioso.
Por supuesto, aun cuando no existen causas médicas complejas como las mencionadas la incontinencia urinaria nocturna también afecta a muchos niños a nivel psicológico. Por ejemplo, estos desarrollan baja autoestima, culpa y vergüenza, así como miedo al realizar actividades nocturnas con sus compañeros y amigos. El Dr. Daniel Cabezalí está preparado para detectar enfermedades, condiciones y trastornos que causen la incontinencia urinaria. De igual manera, tiene conocimiento en el campo y sabe que soluciones aplicar para conseguir una mejoría físico-mental adecuada.