El colegio concertado Hélade, situado en Boadilla del Monte, en la Comunidad de Madrid, ha presentado hoy en sus instalaciones el nuevo sistema de Aerotermia, que ha supuesto una inversión de 500.000 euros. Con ella trata de combatir las altas temperaturas que, cada año llegan más pronto y con mayor intensidad sobrepasando los 40 grados centígrados. Un calor sofocante que impide la marcha normal de las clases. El centro se convierte así en la primera institución educativa de la Comunidad en apostar por este sistema y reducir su huella de carbono. Algo que, en opinión del alcalde de Boadilla, Javier Úbeda, “establece un estándar de calidad para otras escuelas de la Comunidad de Madrid”.
Úbeda ha destacado el “esfuerzo de esta iniciativa” y ha exhortado, tras la crisis energética derivada de la guerra en Ucrania, “a buscar soluciones innovadoras que permitan una mayor soberanía energética, además de una gestión más sostenible y prudente de los recursos”. Como hace esta tecnología en auge, que se enmarca en el ámbito de la eficiencia energética convirtiendo las clases en aulas eficientes.“ Este sistema de aerotermia extrae el exceso de calor del interior en verano y de manera inversa utiliza el calor del aire exterior para calentar por dentro los edificios en invierno” -ha explicado el director del colegio, Carlos Borrego.
Por su parte, el director general de la Enseñanza Concertada, Jorge de la Peña, se ha referido a este sistema como ejemplo para los alumnos que “ven in situ la aplicación práctica de la formación que reciben sobre energías renovables”. Y ha informado que en la parte pública “la Comunidad está invirtiendo en implantar sistemas de refrigeración sostenibles en escuelas infantiles para paliar el calor y también el frío en invierno”. Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) los años 2022/2023 han sido los más calurosos hasta ahora con una anomalía térmica que sobrepasó en 1´4º C y 1´3ºC los valores normales respectivamente. “Hay que evitar lipotimias y golpes de calor así como la cancelación de las clases.
”Este sistema salva, además, el modelo de negocio del centro educativo basado en la diferenciación de sus servicios. “Para distinguirnos de la cantidad de centros públicos y privados del municipio,14 en total, según el consistorio, contamos con una piscina olímpica donde se imparte formación en salvamento y socorrismo acuático” -ha destacado Borrego. Una actividad propia del centro que busca formar para combatir las cifras de ahogamiento acuático en España, 422 fallecidos en 2023, un 8,5% más que el año anterior, según la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo y con una incidencia del 5% en los más pequeños.
Reducir la factura del gas
Pero la aerotermia no solo trata de calentar o refrigerar aulas y otras instalaciones así como llevar agua caliente. Además, reduce la factura del gas “hasta un 50%” ha apuntado Borrego quien califica de “inasumible” el gasto previo. “Tras la pandemia y la guerra de Ucrania y su repercusión en el alza del coste de los suministros, en este centro con 5 plantas, 17.000 m2 y 1.250 alumnos, pasamos de pagar 6.000 euros/mes a más de 30.000 euros/mes en calefacción.” La directiva optó, entonces, por la inversión en este sistema y su aplicación por fases: módulo infantil, piscina (el Decreto 80/1998 exige una temperatura del agua entre 24 a 28ºC y una temperatura ambiente superior en 2 a 4 grados a la del agua), tuberías de agua caliente en todo el colegio y transformación del resto de aulas en eficientes.
Para costear su implantación, cuya amortización quedará solventada en 4 años, el centro ha recurrido a un crowd finance: el 25% aportaciones de otros colegios; 25% Natersys, empresa de tecnología e instalación, y resto entidades bancarias. “Empresas y talento cien por cien español han hecho posible el diseño y desarrollo de este proyecto de enorme envergadura”-ha dicho su director de proyectos, José Antonio Aguilera. Y ha concluido “para su financiación hemos gestionado, además, ayudas energéticas procedentes de los fondos europeos next generation.”