"La clave para un embarazo exitoso con lupus eritematoso sistémico es utilizar un tratamiento que no favorezca los brotes y que no haya existido actividad de la enfermedad en los 6 meses anteriores", explica la Dra. Mariolla Parra, ginecóloga de Ginefiv
La celiaquía puede provocar infertilidad por la incapacidad para absorber nutrientes importantes para la implantación del embrión2
Aunque existe la creencia generalizada de que las enfermedades autoinmunes tienen un alto impacto en la fertilidad femenina, entre los más de 80 trastornos autoinmunitarios que se conocen, cada uno tiene características diferentes en lo que respecta a la fertilidad. Si bien es cierto que en torno al 20% de los casos de infertilidad de origen desconocido suelen ser atribuidos a algún tipo de desorden inmunológico1.
Por eso en mayo, mes en el que tienen lugar el Día Mundial del Lupus (10M), el Día nacional del Celíaco (27M) y el Día Mundial contra la Esclerosis Múltiple (30M), se pone el foco sobre el impacto de estas patologías. Así, aspectos como su prevalencia en nuestra sociedad, la carga socioeconómica que suponen para las familias y el Sistema nacional de Salud, o cómo afectan a la calidad de vida de los pacientes y a sus planes de futuro en aspectos como el proyecto reproductivo, se sitúan en el centro del debate público.
"Hay que tener en cuenta que el sistema inmune a veces no es capaz de diferenciar entre las células del propio organismo y los agentes externos", explica la Dra. Mariolla Parra, ginecóloga de Ginefiv, centros especializados en reproducción asistida. "En la mayoría de las mujeres, el sistema inmunológico desarrolla lo que se conoce como mecanismo de tolerancia para no atacar al embrión durante el período de gestación, ya que se corresponde con una situación anómala para el cuerpo femenino mientras que experimenta el desarrollo de otro organismo con un sistema inmune propio en su interior", añade la especialista.
"Sin embargo, cuando existen ciertas patologías de base, como algunos desórdenes de origen inmunológico, el organismo de la mujer puede identificar a los espermatozoides o al embrión como agentes extraños, dando lugar a situaciones identificadas con la esterilidad inmunológica", concreta la doctora.
La planificación es clave para las gestantes con lupus eritematoso sistémico
Entre los distintos tipos de lupus que existen, el que suele relacionarse con la infertilidad de la mujer es el lupus eritematoso sistémico (LES)3. Esta enfermedad autoinmune sistémica se caracteriza por la inflamación y daño de los tejidos, pudiendo afectar a cualquier parte del organismo, aunque una de las zonas más frecuentes es el aparato reproductor3.
No obstante, las mujeres que se enfrentan a esta patología no son necesariamente estériles y, de hecho, los avances científicos han permitido a muchas mujeres con LES quedarse embarazadas y llevar sus embarazos a buen término. Si bien es cierto que "deben ser gestaciones muy planificadas, muchas veces acompañadas por las técnicas de reproducción asistida para controlar con exactitud aspectos como la medicación y el número de intentos, ya que sigue habiendo más complicaciones asociadas al embarazo como la disminución de la reserva ovárica o la irregularidad menstrual, incluyendo la propia pérdida gestacional", matiza la Dra. Parra.
Por eso, "la clave para un embarazo exitoso es que no haya existido actividad de la enfermedad en los 6 meses anteriores y utilizar un tratamiento que no favorezca los brotes", ya que ciertos medicamentos antiinflamatorios no esteroideos para hacer frente al LES pueden provocar complicaciones en el embarazo y abortos espontáneos, al igual que algunos corticoides e inmunosupresores4.
El diagnóstico temprano permite evitar la infertilidad por celiaquía
Las personas celíacas tienen reacciones inflamatorias en la mucosa del intestino delgado ante la presencia del gluten y, en consecuencia, puede desembocar en otras afecciones como la infertilidad. "Esto es así porque las personas celíacas que no están tratadas son incapaces de absorber ciertos nutrientes como el hierro, zinc o la vitamina B12, que son importantes para la implantación del embrión2", explica la experta. Además, "los anticuerpos que libera el cuerpo de la mujer celíaca no diagnosticada como respuesta al gluten dañan el tejido trofoblástico de la placenta, lo que impide que el feto reciba todos los nutrientes que necesita y se produzcan pérdidas gestacionales recurrentes, siendo habituales los abortos de repetición"2.
Algunos síntomas incipientes de los problemas reproductivos que pueden detectar las mujeres celíacas según la edad a la que se presente la patología de base son: menarquía (primera menstruación tardía), ciclos menstruales irregulares, amenorrea (ausencia de menstruación), dolor pélvico crónico, menopausia precoz, endometriosis, síndrome de ovarios poliquísticos y dificultad para quedarse embarazada2.
Por otro lado, trastornos inmunológicos como la esclerosis múltiple (EM), que habitualmente se ha relacionado con la endometriosis5, no son sinónimo de infertilidad. De hecho, una particularidad de la EM es que, durante la gestación, el sistema inmunitario de la mujer le impide rechazar al feto7, de forma que ese estado inmunológico puede protegerla de la enfermedad y frenar los brotes durante el embarazo7. Aunque "sí es necesario tener en cuenta que la disfunción sexual es común en mujeres y hombres con EM", puntualiza la Dra. Parra. "Esto influye en aspectos como la disminución de la libido6 por lo que, sumado a la interferencia de algunos tratamientos frente a la patología en el desarrollo del bebé7, es recomendable que las mujeres con EM que quieren quedarse embarazadas consulten al especialista en fertilidad", concluye la especialista.