Los neumáticos, junto a los ejes, las ruedas y la suspensión son la segunda causa de suspenso en las ITV con un 21 % del total, según AECA-ITV
Los fabricantes sitúan su vida útil entre los 40.000 y 80.000 km de uso y entre los 5 y 10 años por el propio desgaste del material
El estilo de conducción, el clima y el tipo de carretera, son los factores principales que contribuyen al desgaste de los neumáticos
La certificadora TÜV Rheinland, especializada en ITV, ha lanzado una serie de consejos para cuidar los neumáticos y garantizar la seguridad del vehículo
Los neumáticos están constantemente expuestos a factores que provocan su desgaste, como el estilo de conducción y las condiciones externas como el clima o el tipo de carretera. Indiferentemente del diseño y el modelo, los fabricantes fijan su vida útil entre los 40.000 y 80.000 km de uso y entre los 5 y 10 años por el propio desgaste del material.
En materia de ITV, los neumáticos, junto con los amortiguadores y los frenos, representaron el 21 % de los suspensos, solo por detrás del sistema de alumbrado, según los datos de AECA-ITV. Pero más allá de superar con éxito la inspección técnica, estos elementos (denominados el 'triángulo de seguridad activa' del vehículo), son cruciales a la hora de mantener el buen estado del vehículo y conducir con seguridad.
Por este motivo, desde TÜV Rheinland, multinacional líder en servicios técnicos que cuenta con 39 estaciones de ITV en toda España, han lanzado una serie de consejos pasar la ITV sin problema y, sobre todo, promover la cultura de la seguridad y que los conductores puedan reducir el riesgo de sufrir u ocasionar un accidente.
Revisar la profundidad del estado de la banda de rodadura: Con una simple moneda de un euro podemos comprobar si la profundidad del dibujo está por debajo de los dos milímetros, límite para pensar en la sustitución. Su funcionamiento ideal se produce entre los cuatro y ocho milímetros.
Mantener la presión correcta: Verificar la presión de los neumáticos al menos una vez al mes o antes de un viaje largo. Las fugas son comunes y mantener los tapones de las válvulas en buen estado puede ayudar a tener la presión adecuada.
Evitar aceleraciones y frenadas bruscas: Este tipo de maniobras incrementa el desgaste de la banda de rodadura debido a las mayores fuerzas aplicadas sobre el neumático, además de elevar su temperatura y acelerar la degradación de la goma. A su vez, mantener una conducción suave en las curvas ayuda a reducir el deterioro.
No sobrecargar el vehículo: Respetar los límites de carga aconsejados por el fabricante de tu vehículo. Esto puede aumentar la presión sobre los neumáticos y otros componentes críticos.
Revisar los neumáticos para identificar daños: Inspeccionar visualmente los neumáticos regularmente en busca de signos de daños como impactos o grietas.
Proteger el vehículo de condiciones extremas: El estacionamiento en un lugar resguardado del agua, el frío o el calor ayudará a conservar el estado de los neumáticos.
Desde TÜV Rheinland recuerdan que, al finalizar la inspección, si el resultado es favorable con fallos leves, tendrás que subsanarlos, pero no tendrás que volver a pasar la inspección. No obstante, en caso de que presente defectos graves o muy graves, el resultado podrá ser desfavorable o negativo respectivamente. En este último caso, el vehículo no podrá circular ni para ir al taller y solo podrá utilizar los servicios de una grúa o remolque para transportarlo.
Cabe destacar que la multa por circular con un vehículo cuya ITV está caducada es de 200 euros (100 euros con pronto pago). Ahora bien, si se circula con ITV negativa, la sanción asciende a 500 euros, sin posibilidad de rebaja por pronto pago.