La biotecnología, definida como la aplicación innovadora de sistemas y organismos biológicos para el progreso tecnológico, desempeña un papel crucial en el avance hacia una industria europea más sostenible. A pesar de sus numerosos beneficios en áreas como la salud, la química, la agricultura y la producción alimentaria, se enfrenta a obstáculos significativos para obtener la aceptación pública. Esta falta de certeza genera reticencia tanto en la industria como entre los inversores, quienes muestran poca disposición a adoptar e invertir en soluciones biotecnológicas, contribuyendo así a la persistencia de barreras regulatorias que obstaculizan su implementación.

Reconociendo la importancia de abordar las inquietudes de la ciudadanía, fomentar una comunicación transparente y promover la participación activa de los interesados en los procesos de toma de decisiones, B-TRUST se erige como un esfuerzo fundamental para superar estos desafíos. En sintonía con la Estrategia bioeconómica de la UE y los objetivos del Pacto Verde, el proyecto busca desarrollar un modelo de gobernanza transparente e inclusivo que permita aplicar la biotecnología de manera efectiva en el sector bio-basado y agroalimentario. Con un enfoque específico en informar sobre la seguridad del consumidor y del medio ambiente, fomentar la participación ciudadana y de otras partes interesadas, así como desarrollar e intercambiar las mejores prácticas.

B-TRUST, basado en la Teoría del Cambio para lograr un impacto tangible y utilizando trayectorias de co-creación, se presenta como un catalizador. Su objetivo es cerrar la brecha entre el potencial de la biotecnología industrial y su impacto real en el desarrollo sostenible, empoderando a ciudadanos, consumidores, autoridades públicas, responsables políticos, investigadores e inversores para participar activamente en la co-creación de soluciones biotecnológicas.

Con un presupuesto de 1.5 millones de euros, el proyecto B-TRUST, financiado por la Unión Europea dentro del programa Horizonte Europa 2021-2027, reúne a los tres principales clústeres de alimentos y biotecnología en Europa: Flanders' FOOD, food+i y Food and Bio Cluster Denmark. Además, cuenta con la participación de LAMA Società Cooperaitiva, el Instituto de Biotecnología de Flandes (VIB) y una experta en co-creación, Alice down the rabbit hole, provenientes de cuatro países diferentes (Bélgica, Dinamarca, España e Italia).