Ahora resignarse a llevar un tatuaje mal hecho o que traiga recuerdos tristes ya no es necesario gracias a los avances de la ciencia. Las personas que quieran mejorar su autoestima o cambiar de imagen pueden ponerse en manos de expertos para borrar tatuajes. Un buen ejemplo de ello es Sergio Pérez, técnico especialista del centro Ink Láser, con sede en Alicante.
Desde 2015, Sergio Pérez trabaja junto con Marta Raso, no solo en la eliminación de tatuajes, sino también del microblading de cejas y la micropigmentación de labios.
El uso de la mejor tecnología es la bandera de esta clínica que combina el láser Picosure y el Ink Hunter Máster Pro para quitar totalmente todo el rango de colores.
Ink Láser: resultados óptimos en el borrado de tatuajes
La combinación de la aparatología láser de vanguardia y los cuidados adecuados harán posible que no quede ningún tipo de marca ni cicatriz después del tratamiento, que puede requerir entre cuatro y nueve sesiones. El láser Picosure, de tecnología americana, es una de las mejores opciones disponible en el mercado para quitar tatuajes con colores verdes, azules y morados. Además, el equipo trabaja en picosegundos reales, emitiendo una luz láser con longitud de onda de 755 nm, perfecto para eliminar las tonalidades frías.
Por otro lado, el láser Ink Hunter Master Pro es el más remendado para quitar tatuajes negros, o de colores cálidos como rojos, naranjas o amarillos. El aparato es un láser de tipo Q-Swiched Neodimio-Yag, con una potencia de 1.500 mj, dos longitudes de onda y maneja el sistema flat top para no dejar cicatrices.
Al contactar con los especialistas de Ink Láser vía telefónica, o a través de la página web del centro, los usuarios recibirán un presupuesto personalizado con solo enviar una foto del tatuaje vía WhatsApp. El precio mínimo por sesión, que dura entre cinco y 20 minutos, es desde 30 euros y varía, según el tamaño y los colores del tatuaje o el nivel de dificultad del diseño.
Asimismo, la experiencia de Sergio Pérez y de los profesionales que lo acompañan se suma a su trato cercano para ofrecer la mejor experiencia posible en el momento de borrar tatuajes en Alicante, con un precio razonable y máxima seguridad e higiene.
Borrado en pocas sesiones con 0 cicatrices
Quitar los tatuajes en Ink Láser Alicante requiere pocas sesiones, pero cada caso se resolverá en el tiempo mínimo correspondiente a la cantidad y profundidad de la tinta. Además, Sergio Pérez explica que las sesiones láser suelen ser algo molestas, por lo que recomienda la aplicación de crema anestésica para disminuir el dolor, sobre todo si el tatuaje se ubica en una zona muy sensible o es de gran tamaño.
El usuario notará como el tatuaje irá reduciendo su tamaño en cada sesión, que se realiza con intervalos de dos meses, para asegurar que la piel sane sin dejar cicatrices y que el sistema linfático elimine la tinta totalmente, a través del sudor.
Una piel libre de tatuajes no deseados y sin cicatrices garantizan los expertos de Ink Láser en Alicante, con una atención de primera y muy buenos mejores precios.