La compañía es la cadena de supermercados que más crece en esta categoría, con un 23,1%, y se posiciona como uno de los tres retailers con mayor cuota de mercado.

Lidl da un paso más en innovación y diferenciación gracias a referencias especiales como la de los helados proteicos de su marca propia Gelatelli, formada por 9 referencias, y con diferentes formatos y sabores.

Los helados de Lidl cuentan con certificaciones de cacao sostenible que garantizan que la materia prima se ha recogido respetando el medio ambiente, a los productores y a los trabajadores.

La categoría de helados de Lidl crece un 23,1% respecto al año anterior, superando así el incremento general de la categoría que se sitúa en un 13,3%. Gracias a este aumento, Lidl se posiciona como el segundo retailer que más crece con una cuota de mercado del 8,5%.

Aunque la categoría de helados sigue siendo una de las más apalancadas en la estacionalidad, pues es en verano cuando más helados se consumen, es uno de los sectores que más crecen en todos los sentidos. Entre junio de 2020 y mayo de 2021, los españoles consumieron 149 millones de litros de helado, lo que supone un 4% más respecto al mismo periodo que el año anterior . Además, la situación climática de calor también es determinante en el consumo de estos alimentos. Sin embargo, y a pesar de la situación de incremento de las materias primas, de la subida de precios, y de la reducción de la cesta de la compra, los helados continúan siendo uno de los productos que más aumenta, en este caso hasta un 26%. 

Ante este escenario, Lidl lidera el surtido de marca propia del mercado, con más de 101 referencias y apuesta por diferentes formatos e innovaciones para satisfacer las necesidades de los consumidores.

Una categoría que se adapta a las tendencias

Los helados son de los postres más reconocidos, por lo que estos se adaptan a las tendencias de consumo del momento. En esta línea, Lidl apuesta por la innovación con el fin de llegar a todo tipo de consumidores. Así, a través de sus dos marcas propias, Gelatelli y Bon Gelati, la compañía ofrece todo tipo de helados, desde proteicos-donde cuentan con una gama de 9 sabores-, hasta helados sin azúcares añadidos, de hielo, sorbetes, mochis, veganos, realizados a base de frutas como kiwi, manzana y pepino o con formato americano con trozos de galleta o caramelo, entre otros. A estas innovaciones también se suman las referencias de sabores más clásicos. Además de la apuesta por sabores diferenciales, la compañía también ofrece todo tipo de formatos: tarrinas, copas individuales, conos, o barritas proteicas heladas. Todo ello, siempre, ofreciendo el mejor producto y con la mejor relación calidad-precio.

"En Lidl, somos conscientes de la relevancia de esta categoría y por eso, nos esforzamos continuamente para ofrecer productos innovadores. Nuestro objetivo no es solo poner al alcance del consumidor una variedad de formatos sino también una amplia gama de sabores con la mejor relación calidad-precio para llegar a diferentes públicos y a diferentes tipos de dietas", afirma Miguel Paradela, director general de Compras de Lidl en España.

Aunque los consumidores eligen este tipo de producto por indulgencia y placer, también es importante destacar que los helados pueden formar parte de una dieta saludable. Si se consumen de manera equilibrada y consciente, los helados pueden aportar un gran número de nutrientes y vitaminas. 

En esta línea, en las más de 650 tiendas que Lidl tiene en nuestro país se pueden encontrar todo tipo de helados con los que se puede mantener una dieta equilibrada. Por una parte, se encuentran helados elaborados a base de leche que son fuente de calcio y vitaminas, sobre todo B2; y los elaborados con frutas que contienen más vitaminas y minerales. Aun con su alto valor nutricional, se recomienda un consumo moderado.

Comprometidos con el comercio justo

Como en el resto de las categorías de Lidl que trabajan con cacao, los helados también cuentan con certificaciones de cacao sostenible como el Rainforest Alliance, mediante el cual Lidl fomenta una agricultura justa y respetuosa con el medio ambiente y con las personas en los trópicos; y el sello Fairtrade, que certifica que el chocolate cumple los estándares de comercio justo establecidos por Fairtrade Labelling Organizations International (FLO). El chocolate de comercio justo es un sistema comercial solidario que contribuye al desarrollo sostenible ofreciendo mejores condiciones comerciales y asegurando los derechos de los productores y trabajadores desfavorecidos.

Por último, Lidl también trabaja con el sello UE Bio, con el que se certifica que todos sus productos cumplen los requisitos mínimos de calidad ecológica establecidos a escala europea.