El portal de trabajo Jobatus realizó un estudio que analiza las opiniones reales de 20.900 compañías y 350.300 empleados que forman parte de su plataforma.

Acabando ya septiembre, con la rutina nuevamente establecida en nuestras vidas y con noticias de incertidumbre frente al panorama socio-económico actual, no encontramos con un gran número empresas que de manera legal han establecido un modelo híbrido de trabajo para sus empleados.

Es cierto que las múltiples situaciones que hemos vivido estos dos últimos años como; el Covid-19, la reciente guerra de Ucrania, la subida del IPC o la subida del precio del gasoil han propiciado que muchas empresas establezcan un modelo de trabajo híbrido.

Modelo de trabajo híbrido

A medio camino entre el trabajo presencial y el trabajo online, este modelo,  de trabajo, es el que más fuerza ha cogido estos dos últimos años y ya ha empezado a implantarse en muchas empresas españolas de manera oficial este septiembre de 2022. Este modelo de trabajo combina las características de ambos, otorgando flexibilidad del empleado alternando en la misma semana días en la oficina con días de trabajo en casa.

Así que, aunque a priori parece una idea brillante, y para aceptar el mejor ideal de población activa, el portal de ocupación Jobatus ha querido conocer la verdadera opinión de nuestro país.

Para ello, se desarrollaron dos tipos de encuestas para cubrir los dos puntos de vista del tema en cuestión, de manera que la primera se centra en el análisis de los empleados y candidatos, mientras que la segunda se diseñó para entrevistar a los empresarios. Sin embargo, ambas estudian aspectos comunes, como por ejemplo, los motivos de su elección, las ventajas e inconvenientes de las diferentes opciones, la obtención de resultados empresariales, el rendimiento personal y profesional, las consecuencias económicas que supone completar cada modelo y una previsión de futuro sobre el incremento del individuo y del trabajo en los próximos años. 

Empleados y candidatos

Entre los puntos más destacados de los candidatos y empleados, se obtuvieron los siguientes puntos:

 El modelo de trabajo híbrido es la opción favorita del 78% de los candidatos y empleados entrevistados. Entre sus razones, el 80% de los encuestados indica que el principal motivo es la conciliación familiar, que les permite dedicar más tiempo a sí mismos y a sus seres queridos. Sólo el 13% de los encuestados cree que debería asistir a la oficina todos los días. En el futuro, si tiene que mudarse o buscar un nuevo trabajo, el 90% de los encuestados afirma que favorecerá la flexibilidad horaria a través de un trabajo 100% remoto o buscando un modelo híbrido.

Empresas y empresarios

En el otro lado de la medalla, en cuanto a las respuestas de los empresarios, se obtuvieron los siguientes resultados:

El 65% de las empresas encuestadas han pensado implantar el modelo de trabajo remoto al 100%, mientras que un 35% han pensado en implantar un modelo híbrido. Como principales ventajas destacan el aspecto motivacional y de incentivo que provoca la flexibilidad del tiempo entre los trabajadores. Por otro lado, como elementos negativos, mencionan las dificultades de comunicación, en las se pierden los tonos y los que ofrecen un lenguaje verbal y no verbal. Solamente el  22% de los empresarios piensa que el rendimiento de sus empleados es menor cuando se aplican estos dos modelos de empleo. Por otro lado, un elemento en el que coinciden las respuestas a las dos investigaciones es el ahorro económico. En este caso, las empresas ahorran, puesto que no incurren en gastos de infraestructura, eventos corporativos, energía, consumibles, dietas, vehículos comerciales, etc.

Nota metodológica:

Encuesta online a:

Candidatos Registrados en la plataforma: Encuesta online autoadministrada (CAWI) a través de un panel con un cuestionario estructurado de una duración aproximada de 20 minutos. La encuesta se ha realizado entre Agosto de 2022  y Septiembre de 2022. La encuesta fue enviada a 371.200 participantes. Es decir que la muestra ha sido de 371.200 panelistas que componen una distribución proporcional y representativa de la población nacional de 22 a 64 años y guiada por cuotas de sexo, edad y región y ocupación. El margen de error es de +/- 2,9%.