Los cuentos son una de las mejores formas para estimular la imaginación y el lenguaje de los más pequeños, pero también tienen grandes beneficios para los adultos. Muchos psicólogos sostienen que los relatos son un grato recurso para superar los malos tragos de la vida, reducir el estrés, mejorar la memoria, etc. Para menores y también mayores está dirigido ‘Despierta abuelo ¡Despierta!, un cuento ilustrado publicado por el sello Caligrama, del Grupo Lantia, y escrito por el autor venezolano Jesús Augusto Valeri Dávila.
La historia de ‘Despierta abuelo ¡Despierta! comienza en una casa cerca del mar donde los abuelos pasaban unos días de descanso. Mientras él trata de colgar un cuadro con una mariposa azul, se resbala y se cae. En ese mismo instante el protagonista comienza a escuchar unas voces misteriosas y se traslada a diferentes mundos donde las personas que en ellos habitan le hacen reflexionar sobre la templanza, el cambio climático, la caridad… En definitiva, vive una aventura que nunca olvidará.
La obra está acompañada de unas ilustraciones firmadas por la hija del autor que representan cada uno de los lugares a los que se traslada el abuelo. Analizando el contenido, en cada una de sus líneas se aprecia que el autor ha alcanzado un estilo narrativo propio y maduro, además de ser muy expresivo. Permite sonreír al lector y además aporta formación en valores para los más pequeños.
El autor
Jesús Augusto Valeri Dávila (Venezuela) nació en Mérida, una hermosa ciudad situada al pie del pico Bolívar, el pico más alto del país con una altura de cerca de 5.007 metros sobre el nivel del mar. El autor formalizó sus estudios en farmacia en la Universidad de los Andes (ULA), pues desde muy temprana edad le encantaba el quehacer boticario por la empresa familiar. Ha sido un apasionado del arte y la aventura junto a su esposa, que ha sido su compañera de viajes por el mundo. El nacimiento de su primera hija motivó que empezará a imaginar y narrar cuentos. La destreza y habilidad artística en la pintura e ilustración de su segunda hija, que se especializa en diseño industrial, les llevó a materializar los cuentos imaginados por Jesús, que sigue escribiendo, pues se ha vuelto un apasionado de la aventura imaginaria, como a él le gusta decir.