A través de los informes realizados por los psicólogos forenses, se pueden evidenciar hechos y delitos que son difíciles de demostrar con otro tipo de pruebas, ya que se basa en el análisis del pensamiento. Estos pueden ser decisivos en un caso legal.
En el momento de realizarlo, los profesionales encargados de este análisis deben ser peritos psicólogos con especialidad en psicología forense. Su ámbito de trabajo se encuentra en el derecho civil, de familia, laboral y penal. En este sentido, Peritajes y Mediación posee un prestigioso equipo dirigido por el Dr. Alejandro Ávila cualificado para que estos informes constituyan una prueba judicial determinante en un juicio.
¿En qué consiste una pericia psicológica?
La pericia psicológica es una serie de conclusiones provenientes del análisis de comportamiento de las personas implicadas en un caso. Dichas deducciones se reflejan en un informe redactado por un perito psicológico.
Según la Ley de Enjuiciamiento Civil, la pericia psicológica es una herramienta que puede ayudar a entender los conflictos. En el artículo 610 se admite el uso de la prueba de peritos para considerar “conocimientos científicos, artísticos o prácticos”.
En este sentido, el profesional tiene como función ayudar a que los jueces, teniendo las evidencias e informes en mano, estimen la importancia o gravedad de los hechos realizados. No obstante, en el artículo 632 aclaran que los jueces no están obligados a apegarse al análisis de los peritos, pero sí pueden considerarlo en su decisión final.
¿Cuándo y cómo contratar a un perito psicológico?
Las pericias psicológicas son necesarias en ciertos casos en los que los factores psicológicos están implicados legalmente. Por ejemplo, en caso del juicio por la custodia de los hijos, el padre o madre puede llevar un informe que lo valide como un buen tutor. Asimismo, cuando se denuncia por trato hostil en el ámbito de trabajo, violencia psicológica, entre otros temas similares, será necesario el informe del perito especializado para demostrar los daños a nivel psicológico.
Estos informes pueden ser solicitados judicialmente, según lo establecido en los artículos 457 y 458 de la Ley de Enjuiciamiento Civil. Esto ocurre cuando el juzgado o los tribunales acuden al perito para aclarar las dudas en un caso. Asimismo, las partes involucradas pueden acudir a un profesional independiente para solicitar sus servicios y sustentar mejor su caso.
En empresas como Peritajes y Mediación se pueden conseguir profesionales que trabajan en áreas específicas, por lo que su análisis puede tener gran relevancia en un caso legal. Entre las especializaciones, destacan la psicología penitenciaria, judicial, policial, del menor, victimología, entre otras.
La compañía tiene una larga experiencia de 30 años con más de 1.000 casos resueltos de forma satisfactoria. Esta es una referencia de la calidad del servicio para futuros clientes.