El consumo de plátano es esencial en el día a día de numerosos deportistas por ser un gran aporte de energía, prevenir calambres musculares, favorecer la circulación de líquidos y mejorar el estado de ánimo
A cada minuto que pasa se consumen 332 plátanos en la Región de Murcia. Se trata de una estimación realizada por la guía Apuestas Deportivas, para la que se ha utilizado la Encuesta de Presupuestos Familiares del INE, los datos de población de cada territorio y se ha considerado un peso medio de 100 gramos por plátano.
De media y en total, los murcianos consumen cada año 174 millones de plátanos. En la región siempre hay alguna persona comiéndose una banana, ya que, de media, a cada segundo se pelan más de 5 plátanos -o se consume la parte proporcional en otro tipo de preparados-.
En internet existen numerosas recetas en las que se utiliza el plátano en tortitas, bizcochos, galletas, magdalenas, batidos, tartas, helados, flanes, en una macedonia, como complemento en el arroz a la cubana, frito e incluso cocinado a la parrilla. Sin embargo, el plátano es fácil de transportar y consumir: solo hay que pelarlo y comerlo. Esta facilidad y una composición muy especial convierten a esta fruta en un gran recurso para los deportistas.
¿Por qué el plátano es bueno para el deporte?
Cualquiera que frecuente un gimnasio habrá visto alguna vez a alguien comiéndose una banana en las instalaciones. Tampoco es extraño ver a deportistas profesionales consumiendo plátanos. Ciclistas, futbolistas, tenistas y muchos otros aprovechan sus extraordinarias propiedades nutricionales antes, durante y después de sus exigentes pruebas:
El plátano transmite su azúcar a la sangre de forma muy rápida, por lo que es un suministro casi instantáneo de energía: tiene un elevado índice glucémico (IG) y destaca por su contenido en fructosa, potasio, magnesio, hidratos de carbono, ácido fólico, fibra y vitamina B6.
Reduce la posibilidad de sufrir calambres musculares, como cuando 'se nos sube la bola' del gemelo, algo que puede suceder cuando se realiza ejercicio intenso durante un tiempo prolongado. Un solo plátano aporta casi una cuarta parte de todo el potasio que se necesita en un día, lo que junto a sus hidratos de carbono y el magnesio ayuda a prevenir las contracciones musculares.
Favorece la circulación de líquidos, reduce la presión arterial y previene enfermedades cardiovasculares. De nuevo el potasio ayuda a equilibrar los niveles de líquido, previene la diabetes o la hipertensión y regula el colesterol.
Protege el estómago, facilita la digestión, previene las úlceras y, de hecho, es una recomendación habitual cuando se padece descomposición. El plátano es rechazado a veces por tener un alto contenido calórico, pero la verdad es que previene las malas digestiones y los ardores.
Mejora el estado de ánimo, algo que es especialmente importante mantener después de un evento duro o importante. Lo hace gracias a sus importantes niveles de triptófano, un aminoácido que promueve la generación de serotonina.