Renting Finders suma a su oferta de renting tradicional y renting flexible el renting de vehículos usados. Precio (más bajo) y fiabilidad son dos de las ventajas de optar por el alquiler a plazo de un vehículo de segunda mano. El mantenimiento, reparaciones y otros gastos comunes corren por cuenta de la empresa de renting, exactamente igual que con un vehículo nuevo
Más barato que el renting convencional, pero con las mismas ventajas, ¿es posible? Sí, la fórmula se llama renting de coches de segunda mano y gana adeptos día tras día.
Renting Finders suma a su oferta de renting tradicional y renting flexible el renting de vehículos usados. La opción perfecta para quienes tienen un presupuesto más ajustado, pero no por ello quieren renunciar a ninguna de las ventajas del alquiler de vehículos a largo plazo.
Renting de vehículos usados: las claves
Apenas hay diferencias entre las bases que regulan los contratos de alquiler de los vehículos de renting a estrenar y los que han sido usados previamente.
Como en los primeros, la cuota mensual incluye seguro a todo riesgo sin franquicia, mantenimiento y posibles averías. En el renting de ocasión, los contratos son a 12 meses; el cliente puede establecer un máximo de kilometraje de 10.000, 20.000 o 30.000 km; y tienen posibilidad de cancelación sin costes desde el sexto mes.
Los vehículos de renting de segunda mano que ofrece Renting Finders han tenido un único propietario anterior. Para garantizar que están en buen estado los coches son sometidos a una profunda revisión antes de entrar a formar parte de la oferta de renting de vehículos usados. Sólo los que cumplen los exigentes requisitos de calidad establecidos por Renting Finders vuelven al mercado
Por último, hay que destacar que el renting de vehículos usados ofrece posibilidad de compra; esta se efectuará teniendo en cuenta las cuotas abonadas, con un máximo de tres de descuento.
Cuatro razones para apostar por el renting de vehículos usados
La primera es económica. No estrenar coche implica pagar menos. De media, la diferencia entre el renting de un vehículo nuevo y uno usado de las mismas características e idénticas coberturas es de unos 80 euros mensuales. Esto supone que a lo largo de los 12 meses el ahorro es de cerca de 1.000 euros.
La segunda es que están mejor equipados. Sin llegar a ser la versión tope de cada modelo, los coches de renting cuentan con los últimos avances en sistema de seguridad, confort e infoentretenimiento; además de montar las motorizaciones más eficientes.
La tercera se refiere a la fiabilidad. Al ser la compañía de renting la encargada de realizar labores de mantenimiento, un renting de segunda mano ofrece la garantía de que el vehículo ha pasado todas las revisiones periódicas establecidas por el fabricante. También permite al nuevo conductor conocer si ha tenido averías durante su vida anterior.
Y todo esto con la tranquilidad de que en caso de sufrir cualquier imprevisto mecánico, será la empresa de renting quien se haga cargo de la reparación sin sobrecoste alguno.
Por último, está la inmediatez. La espera es muy reducida. En un momento en que la espera para recibir un coche nuevo supera los seis meses, el renting de ocasión ofrece, en muchos casos, entrega inmediata.