Uno de los expertos de CIM Formación en bienestar animal, Amparo Fortea, explica los principales consejos para viajar con nuestras mascotas esta semana santa:

·   Solo el 5% de las mascotas pueden permanecer unos días solas sin deprimirse. La soledad es la mayor tortura para los perros.

·   Si hacemos viajes cortos de prueba que acaben con un paseo olfativo, el perro lo guardará en su memoria y el paseo será menos traumático.

·   Habría que evitar que las mascotas viajen en la bodega de un avión, mejor dejarlos con un familiar o en un hotel..

Más de 9 millones de hogares españoles cuentan con un perro en casa, más de 8 millones con gatos. Muchas de estas mascotas sufren en los viajes en coche, se estresan y marean, aún así no es conveniente dejarlos solos en casa, aunque sea por poco tiempo y con comida, Amparo Fortea, experta en educación canina y bienestar animal de CIM Formación, advierte que “la mayoría de los perros sufren de ansiedad por separación o incluso miedo a la soledad. Nuestros perros son animales sociales y gregarios, eso implica que necesitan la presencia de su manada humana, y a veces canina, para vivir en equilibrio emocional”. Desde CIM Formación recuerdan que la soledad es la mayor tortura para ellos.

¿Cómo viajar con perros en coche de manera agradable?

Hay que entender que las primeras veces que un animal viaje en coche, le va a estresar. “El coche es un entorno que se está moviendo sin que lo puedan controlar, hace que pierda el equilibrio por los cambios de inercia” explica Amparo Fortea, “los perros, para poder compensar ese desequilibrio fisiológico y mental, ponen en marcha un mecanismo llamado ‘sistema nervioso parasimpático’ o ‘control homeostático’, que les provoca bostezos, salivación, náuseas e incluso vómitos”. Lo ideal es hacer viajes preparatorios presentarle las cosas en positivo.

·   Cuando vamos a viajar por primera vez con nuestro perro, debemos hacer previamente trayectos cortos, con pocas curvas y velocidad reducida.

·   Si normalmente lo llevamos en trasportín, lo incorporamos a los primeros trayectos, si no, viajará en brazos o en el asiento con su cinturón puesto.

·   La ventana irá medio abierta por si necesita sacar la cabeza si le apetece.

·   Si vemos que empieza a bostezar tres veces seguidas, paramos y le damos un paseo.

El trayecto debe acabar con un paseo olfativo divertido para el perro como, por ejemplo, ir tirándole trocitos de chucherías por delante para que tenga que buscar y rastrear. Al volver a casa, lo mismo. Repetir dos o tres veces y quedará fijado en su memoria para siempre.

¿Qué podemos hacer si nuestra mascota ya tiene malas experiencias previas en el coche y no quiere subir?

Según Fortea, “Si nuestro perro ya tiene una asociación mala y se marea incluso nada más subir al coche, hay que volver a empezar de cero y, progresar muy poco a poco, empezando por darle de comer dentro del coche con el coche parado sin arrancar y de ahí. Si se quiere, se le puede administrar un fármaco anti-mareo o complemento natural como la Nauserina, hecho con jengibre, veinte minutos antes de subir al coche”.  

Además de los consejos para el viaje los expertos de CIM Formación aconsejan que, si el perro o mascota se ha mareado, lo mejor al llegar es dejarle que pasee y olfatee el nuevo entorno. También es importante tratar de darle agua que reponga la hidratación. En el caso de los perros, “cuando veamos que se sacude y su cola vuelve a su estado “alegre, es señal de que ya podemos seguir” explica Amparo Fortea.

¿Viajas en avión? Mejor déjalo en tierra con alguien de confianza

Cada vez son más las compañías aéreas que no aceptan mascotas por el problema que supone la responsabilidad y manipulación del animal. Y los que todavía lo permiten, por desgracia, las condiciones no son las óptimas. Hasta 8 kilos pueden viajar dentro de su transportín, pero deben ir debajo del asiento (a excepción de los perros guías). De 8 a 45 kilos, deben viajar en la bodega con el equipaje, eso supone sufrir temperaturas demasiado bajas y ser manipulado casi como si fuera una maleta. Además, no se recomienda darles tranquilizante para evitar el estrés del viaje ya que les baja las defensas y pueden acabar con una pulmonía.

Por tanto, desde CIM Formación, como expertos recomendamos que, si se va a viajar en avión de vacaciones, especialmente si tan solo es por unos días o semanas, es mejor que se quede en casa de algún familiar o amigo que pueda cuidarlos, si no, llevarlo a una residencia u hotel canino de confianza.