Durante el último año, la venta de vehículos nuevos y de segunda mano se ha desplomado como consecuencia de la crisis del coronavirus. Y es que el coste de tener un coche en propiedad va mucho más allá del precio del vehículo y puede suponer un auténtico lujo para muchas familias. Acierto analiza estos costes y ofrece algunos consejos para ahorrar.
El coste de tener un vehículo en propiedad
Así, al precio del vehículo hay que sumarle el del mantenimiento, los impuestos, el gasto en combustible, del seguro, el de las reparaciones, etcétera. En concreto y según los datos a los que ha tenido acceso la entidad, el precio medio de los vehículos matriculados en España durante el último año ha sido de 20.647 euros, impuesto de matriculación incluido. Una cifra que supone un incremento notable respecto del 2019, cuando rondaba los 18.000 euros.
Otro punto clave es los kilómetros que recorremos con nuestro coche, pues incide directamente en el gasto en combustible y en el mantenimiento. En España el rodaje medio de un coche particular se sitúa alrededor de los 12.600 kilómetros. Y la edad media del parque automovilístico es de 13,1 años. Es decir, en este período de tiempo se recorren unos 165.000 kilómetros.
El precio medio del litro de gasolina se encuentra en los 1,48 euros, y el del diésel en los 1,36 euros (la media es de 1,42). A esto hay que sumarle el consumo medio de los vehículos nuevos, que se encuentra por debajo de los 5,0 litros cada 100 kilómetros. Lo que viene a suponer un coste por kilómetro de 0,068 euros. Unos 11.500 euros por esos 165.000 kilómetros.
Respecto al mantenimiento, se estima que cada kilómetro cuesta unos 0,06 euros en reparaciones. El cálculo ha sido obtenido teniendo en cuenta las reparaciones estimadas por número de kilómetros y su precio medio. En total unos 9.900 euros.
En cuanto al precio de la póliza y tal y como apunta el comparador de seguros Acierto, dependerá en gran medida del tipo de seguro por el que nos decantemos. “No será lo mismo optar por un todo riesgo que otro a terceros más básico”, indican los expertos. En cualquier caso, el precio medio de los seguros de coche se sitúa en torno a los 400-500 euros anuales. En 13 años, 5.200 euros como mínimo.
A todo esto habría que añadir los gastos en impuestos e ITV –unos 1.000 euros en los 13 años de vida del vehículo–, así como los desembolsos realizados en aparcamientos, peajes, limpieza, los intereses si hemos decidido financiarlo, etcétera.
Cómo ahorrar con el coche
Por suerte, existen maneras de ahorrar con el coche ya que, en muchas ocasiones, se trata de algo imprescindible. Es decir, podemos ahorrar tanto en la compra del vehículo como en el combustible y el seguro, entre otros.
Por ejemplo, al comprar un coche es importante comparar en diferentes concesionarios, plantearse si es necesario adquirir uno nuevo o nos bastará con uno de kilómetro 0 o segunda mano, etcétera. Una buena alternativa, por ejemplo, es escoger un modelo que esté a punto de desaparecer del mercado (suelen ser un 20% más económicos que sus sucesores).
Elegir el motor adecuado, el combustible que se adapte a nuestras necesidades y equiparlo con cabeza también es fundamental. En cuanto a la financiación, es importante revisar la TAE y todas las condiciones. También es posible utilizar un comparador financiero para buscar la financiación más adecuada. Pero, para hacerse una idea al valorar la oferta, la TAE media de los créditos al consumo con un plazo de entre 1 y 5 años se ha movido entre el 7,50 y el 8,20, según el Banco de España. Comprobar los planes de ayuda del Gobierno es otro punto que no debería perderse de vista.
Dónde repostar también es importante, puede haber diferencias de más del 20% según la gasolinera. Por fortuna, hay aplicaciones específicas que nos ayudan a detectar cuáles son las más económicas.
No prescindir del mantenimiento del coche, ni del seguro
Otro aspecto básico es no dejar pasar las visitas al taller. Un buen mantenimiento del vehículo evitará averías graves y problemas mayores, sobre todo teniendo en cuenta que estamos hablando de vehículos cuya vida supera los 10 años.
Por desgracia, durante los últimos meses los talleres han registrado un descenso de las ventas de hasta el 60%. El motivo es que muchos propietarios no acuden al mecánico a no ser que sea imprescindible. Para ahorrar en el taller podemos consultar precios, pedir presupuestos y fijarnos en los recambios, entre otros. Es aconsejable, además, revisar la presión de los neumáticos, planificar los desplazamientos y no coger el coche para todo.
Por supuesto, el seguro del coche es obligatorio y supone un auténtico peligro circular sin él. También lo es tratar de ahorrar con coberturas pues, en ocasiones, si escogemos una póliza demasiado básica, no estaremos respaldados adecuadamente en caso de siniestro. Para ahorrar con el seguro del coche lo mejor será comparar.. Hacerlo permite ahorrar hasta un 50%. Otros consejos de Acierto son: no mentir a la compañía, no fraccionar el pago si es posible, e intentar ser buen conductor (cuantos menos siniestros y de menor gravedad, menos riesgo para la aseguradora).
Ahorrar conduciendo es posible
Ahorrar conduciendo es posible también: ajustar la velocidad para tener una conducción más eficiente, apagar el motor de vez en cuando, olvidarse de los acelerones, cambiar de marcha cuando es necesario, aprovechar la inercia, esperar para encender la calefacción o el aire acondicionado… Son otros trucos. Aparcar a la sombra en verano y al sol en invierno, y no sobrecargar el vehículo nos ayudará.