Los objetivos de Capri son que cualquiera pueda tener acceso a una bicicleta eléctrica, reducir al máximo la huella de carbono en la fabricación de cada una de sus bicicletas y reducir el nivel de contaminación en la ciudad. Además, pretenden democratizar su uso con una bici eléctrica muy fácil de usar, sin complicaciones.
La bicicleta Capri Berlín eléctrica estará a la venta en su campaña de lanzamiento exclusiva en online, desde 975 euros.
Empieza septiembre y, con él, el nuevo curso. Uno de los retos de casi todos, este año, es ser más sostenibles. Por ello, la conocida marca de bicicletas Capri ha lanzado una joya sobre ruedas: su nuevo modelo Capri Berlín eléctrica. Se trata de una sorprendente bici eléctrica con todo el estilo de las bicicletas clásicas, muy cómoda y fácil de usar. Perfecta para poder moverse por la ciudad sin contaminar. Se trata de la bici de siempre, pero eléctrica. Este año, además, se convierte en un imprescindible en movilidad, ya que el uso de la bicicleta se ha disparado en el último año.
Pedaleando fuerte
Cómoda y versátil, la Capri Berlín eléctrica es muy ligera, ya que solo pesa 19 kg (un 25% menos de lo habitual), tiene un diseño minimalista y precioso, aportando fiabilidad y confianza, como es costumbre en la marca, y un precio muy asequible (desde sólo 975 euros), y con componentes de primera calidad. Está disponible en dos colores, negro y crema, para poder pedalear por cualquier sitio con mucho estilo y sin contaminar.
Atemporales, minimalistas, cómodas… Todas las bicicletas eléctricas de CAPRI están fabricadas íntegramente en Europa y cuentan con componentes de fabricantes legendarios como Victoria, Shimano o Bafang.
Esta nueva bicicleta eléctrica se caracteriza por ser práctica, manteniendo el estilo clásico sin renunciar a la ayuda del motor, que convierte las cuestas de la ciudad en suaves rectas como por arte de magia. Cuenta con un display muy sencillo para no complicarse con toda la información necesaria para un viaje perfecto (el estado de la batería y la velocidad a la que se va...), una batería extraíble con un diseño ultra-fino (la más ligera del mercado) y un motor muy fiable. Y lo mejor… ¡requiere un mantenimiento mínimo! Sin complicaciones.
Además, el objetivo de la marca es reducir al máximo la huella de carbono en la fabricación de cada una de sus bicicletas y ayudar a mantener una industria con gran tradición en Europa que ha sufrido por la gran deslocalización a los países asiáticos.
Y lo mejor, la marca sigue vendiendo después de 10 años, directamente al consumidor, sin intermediarios.