Intimidad, vistas privilegiadas, la tranquilidad de vivir a mayor distancia del ruido de la calle y del tráfico, el hecho de poder disfrutar de jornadas al aire libre en el corazón de la ciudad… Y, por supuesto, la exclusividad de hacer uso de uno de los bienes más codiciados del mercado inmobiliario.

Los áticos siempre han sido escasos y muy demandados. Y, ahora, con el recuerdo del confinamiento sufrido a raíz de la crisis sanitaria aún reciente, junto con los cambios en los hábitos y preferencias de consumo y la situación económica que el COVID ha traído consigo, la posibilidad de disponer en tu vivienda con una amplia terraza donde disfrutar de la luz natural y el aire puro ha contribuido determinantemente a que la cotización de estos inmuebles crezca más todavía.

Este tipo de vivienda, que corona los edificios y cuyo tesoro son unas terrazas que van de 30 a 300 metros cuadrados, está considerada como una auténtica joya en el mercado inmobiliario. No sólo por su elevado precio y por lo limitado de su oferta, sino también porque constituyen un activo de garantía que resiste como ningún otro las épocas de crisis.

Por estos motivos, el desembolso que exige un ático suele ser de media un 30% superior que el de cualquier piso intermedio. Y, cuanta más altura, más se eleva su precio. En cifras absolutas, una última planta en España se sitúa actualmente alrededor de los 300.000 euros.

En la comparativa entre regiones, Madrid está a la cabeza como la más cara y en la que se ofertan los áticos más grandes, con una media de 151 metros cuadrados de superficie y en torno a los 600.000 euros de precio. Cuatro veces más que en Castilla-La Mancha, la más barata.

Respecto a los áticos de lujo, ubicados en las zonas más nobles de las ciudades, sólo al alcance de quienes estén dispuestos a dejarse varios millones de euros en su compra, lo más caro se encuentra, de nuevo, en Madrid, donde cada metro cuadrado se vende a 12.500 euros.

El mercado de segunda mano, en el que los precios son un 35% más baratos que la obra nueva, en cambio, incluso permite que un ático de características similares se pueda llegar a adquirir hasta un 50% más barato.

Sin embargo, el precio no el único obstáculo para los interesados en estos inmuebles, a quienes también se les presenta un enorme problema de escasez.  Se estima, de hecho, que la demanda de áticos multiplica por 3 su oferta. En el caso de Madrid, sin ir más lejos, apenas representan un 6% del total. O lo que es lo mismo: por cada 50 anuncios publicados en portales inmobiliarios, sólo 1 es un ático.

Por suerte para quienes estén persiguiendo su sueño de vivir en un ático en Madrid, Mimasion, la agencia creativa de hogares y la alternativa de referencia en España a las inmobiliarias convencionales, presenta 2 ofertas actualmente disponibles en su portfolio de viviendas con las que hacerlo realidad: