A lo largo de los años, siempre ha existido un debate en torno a si lavarse el pelo con mayor o menor frecuencia es perjudicial o no para la salud del cabello. Sin embargo, lo cierto es que cada cuero cabelludo requerirá de una frecuencia de lavado diferente, que variará en función del tipo de pelo y de piel de cada persona, así como de la textura del cabello o del nivel de actividad física que se practique, aseguran desde la clínica de medicina capilar MC360.
"Aunque los lavados deben ajustarse a cada persona, en general un lavado excesivo o no adecuado puede provocar una irritación excesiva del cuero cabelludo. Sin embargo, es verdad que hay personas que necesitan lavados con productos específicos porque de por sí tienen ya irritaciones, y tampoco es bueno mantener inflamaciones y descamaciones", subraya el Dr. Gómez, adjunto a Dirección Médica de la clínica MC360.
Cabe destacar que, si lavamos el pelo en exceso, éste podrá dañarse con la tracción y, en consecuencia, quebrarse o partirse. En este caso, podremos notar una sensación de falta de densidad si es mucha la cantidad de pelo que se parte, aunque esto no afectará al folículo como tal y se tratará de pelo que volverá a salir con posterioridad.
Por ello, el mito sobre si lavarse el pelo con frecuencia produce la aceleración de la caída del cabello se convierte en falacia, ya que este no se cae como tal, al no existir destrucción del folículo. "El folículo se destruye cuando hay situaciones inflamatorias o daños del cuero cabelludo en sí que no se tratan. Esto puede provocarse por champús o en aquellas personas que tienen patologías previas.", indica el Dr. Gómez.
Pautas recomendadas para el lavado de cabello
A pesar de que cada cabello cuenta con una particularidad y unas características diferentes, existen algunas pautas generales en cuanto al lavado que deben tener en cuenta aquellas personas que se han sometido recientemente a una intervención capilar, dado que el lavado del pelo durante el primer mes deberá de ser diario, siguiendo siempre las indicaciones médicas y de tricología.
Por otro lado, lo ideal será ajustar la frecuencia de lavado de cabello en aquellas personas que no se han sometido a ninguna intervención o que se han realizado un injerto capilar hace más de un año, ya que el cuero cabelludo tiene unas necesidades diferentes en cada caso y no podrá lavarse con la misma asiduidad un cabello graso que uno seco.
A este respecto, el adjunto a Dirección Médica de MC360 señala que "algo que sí resultará fundamental será el champú que utilicemos, que deberá estar adaptado tanto al cuero cabelludo, como al tipo y al estado de nuestro pelo en ese momento determinado. Además, cada vez que notemos el pelo sucio tendremos que lavarlo, por lo que aquellas personas a las que se les suele ensuciar con frecuencia deberán optar por un lavado diario".