Alicante, 27 de mayo de 2021 La llegada de la pandemia ha acentuado la importancia de transformar digitalmente las pymes españolas, aunque esta evolución ya había empezado mucho antes.

Según un estudio del Instituto Nacional de Estadística (INE) en el año 2020, en España, el 91,3% de la población utilizaba internet de manera frecuente, es más, el Informe Mobile en España y en el Mundo 2020 de ditrendia refleja que 7,6 millones de españoles se consideran "adictos" a sus móviles.

El problema es que la mayoría de los empresarios creen que ahora, que ya se ve la luz al final del túnel el camino es volver a los viejos hábitos. "Un negocio vende a personas y los hábitos de la empresa tienen que estar alineados con los hábitos de la sociedad. La pandemia lo único que ha hecho es acelerar esta obligación de cambio", afirma Carlos Delgado CEO y fundador de la escuela de negocios para autónomos y pymes LEVEL UP.

Nadie escapa a la digitalización. Es cuestión de supervivencia.

Muchas empresas se han visto obligadas a buscar nuevos puntos de venta para asegurar su sostenibilidad a corto plazo, sin embargo, pocas han tomado la decisión de usar estas plataformas de trabajo y visibilidad de forma prioritaria.

"Puedes buscar excusas para convencerte de que no es tan necesario, pero si piensas en la tendencia social y empresarial lo vas a tener que hacer", y añade: "por ello, la transformación digital debe ir propulsada por una evolución cultural de las pymes españolas. Si la pequeña/mediana empresa quiere ser sostenible a largo plazo tiene que adaptarse a estos nuevos hábitos e incorporar el uso de herramientas digitales de forma urgente"

El gran problema de la pyme española es que se centra en la meta, pero no en el cómo llegar a la meta.

Carlos aclara: "Si quieres correr una maratón, te preparas durante meses. De igual modo sucede en los negocios, si quieres llegar a la meta, debes prepararte" y concluye "vivimos en la era del conocimiento, disponemos de mucha información y herramientas a las que podemos acceder a través de internet sin coste adicional. La pregunta es ¿Hasta dónde está dispuesto a llegar el tejido empresarial español?"

Ya hay miles de pymes que han iniciado su transformación e inspiran al resto con resultados como estos:

Un peluquero de Zaragoza lanza su propia academia y utiliza internet para atraer cientos de nuevos clientes facturando 50.000€ solo con 1200€ de inversión.

Un abogado que tuvo que paralizar su despacho en plena pandemia lanzó su máster en derecho deportivo y ha facturado cerca de 400.000€ solo en su primer año de actividad

Dueño de academia de inglés que lanzó su formación online con un ticket medio de 1000€