Los distintos fenómenos atmosféricos de heladas, agua y frío que está sufriendo actualmente el país, no solo causan daños materiales sino que está afectando de manera considerable a la gran mayoría de las personas y hogares españoles
En esta época invernal la calefacción es uno de los grandes motores de la temporada y también un importante quebradero de cabeza para muchas de las personas, que ven como gran parte de sus recursos económicos están destinados a calentar el hogar, a poder alcanzar una temperatura de confort en la vivienda.
Un buen sistema de aislamiento de la vivienda unido a la instalación de un buen sistema de aire acondicionado con bomba de calor, utilizado como calefacción durante el invierno, conlleva a la obtención de un importantísimo ahorro de energía anual.
Las calderas, termos, bombas de calor y otros sistemas de climatización llevan el confort a cualquier vivienda incluso a aquellas con climas extremos donde parece imposible; garantizando el confort en los hogares, proporcionando una máxima tranquilidad a los propios inquilinos y logrando mejorar la economía del hogar.
Los sistemas de aire acondicionado con bomba de calor, compiten con otros sistemas de climatización, ya que en la mayoría de los casos también son utilizados para enfriar el ambiente (en los meses de más calor), como para calentarlo (durante los meses de mucho frío).
Las características del funcionamiento de los aires acondicionados son exactamente las mismas tanto en los meses verano como en invierno, tan solo difiere en la temperatura que estos aparatos van a emitir, dependiendo de la época del año.
La principal ventaja del uso de la bomba de calor del aire acondicionado en los meses de invierno radica en la excelente relación coste-beneficio, mucho mejor que la de otros sistemas de calefacción como aparatos eléctricos, o estufas de aceite y radiadores.
Gracias al avance tecnológico, se necesita menos tiempo de uso para calentar cualquier estancia de la vivienda, caldear una oficina o despacho. Además cuentan con un sistema de autorregulación con el que medir la temperatura del ambiente y solo ponerse en funcionamiento cuando la temperatura programada disminuya.
Por cada grado que se incrementa la temperatura, el consumo energético aumenta en un 7%, por ello, adaptarse a una temperatura confortable sin necesidad de ir de manga corta en la vivienda ayuda a ahorrar. La temperatura aconsejada durante el día es entre 19º y 21º centígrados, mientras que durante la noche se aconseja entre los 15º y los 17º.
La programación previa del temporizador influye en el mayor o menor consumo eléctrico. Cuando se intenta caldear una zona de manera rápida el consuno se dispara, por lo que los aparatos de aire acondicionado para el calor al poder programarse, durante la noche pueden hacer uso de las tarifas más económicas de consumo de energía. Los profesionales de Ariston Valencia ofrecen un servicio de instalación y reparación especializado en toda la Comunidad Valenciana.