Aunque las aerolíneas han tomado la decisión de realizar los vuelos que sean de extrema necesidad, cuando son necesarios llevarlos a cabo, tripulantes de cabina se ven expuestos a enfrentarse a la posibilidad de caer infectados.

Si bien es cierto, que los tripulantes adoptan todas las medidas de protección y seguridad para prevenir el contagio, piden que también los pasajeros tomen las medidas de protección necesarias. Pues todavía hay pasajeros que no se protegen durante el vuelo, o se producen aglomeraciones en las entradas y salidas de los aviones, así como en la entrada al baño.

Para que todo esté bajo control, las azafatas de vuelo se realizan test de COVID-19 para tener claro que no pueden contagiar a los pasajeros o compañeros. También, han adoptado nuevas medidas como sustituir el servicio a bordo por comida fría y empaquetada que los pasajeros puedan coger al entrar el avión. De esta manera se previene el posible contacto entre tripulante y cliente.

Otras medidas adoptadas son organizar los turnos de desembarque para que no se formen multitudes al entrar y salir del avión. Era difícil controlar a los viajeros a las entradas y salidas del avión, por lo que, la mejor decisión que han tomado las compañías aéreas es establecer un sistema bien organizado de 10 en 10 personas, y siguiendo un estricto protocolo que prevenga que los pasajeros se acerquen más de lo recomendado. Lo mismo se ha adoptado para los accesos a los baños, evitando que se organicen colas y obligando a que guarden la distancia de seguridad entre ellos.

En Ceae, se ha implementado un nuevo temario en los cursos de azafata de vuelo para que los alumnos sepan como afrontar la situación del Covid- 19.

En el caso de las maletas de mano que van en cabina, han pasado a la bodega del avión, de manera que se evite el foco de contagio. Además, los TCP se encargan de repartir gel antiséptico o toallitas desinfectantes a los pasajeros para que puedan limpiarse cuando toquen los elementos del avión.

Los tripulantes de cabina y pasajeros (TCP) están realizando un trabajo extraordinario para cumplir con la normativa y prevenir la propagación del virus. Se encargan de desinfectar la cabina entre vuelo y vuelo y de tomar todas las medidas de prevención necesarias para ayudar a la situación.