La Biblioteca Municipal acogerá la presentación de El Arpista ambientada en La Manga de los 60 y tercera clasificada en el Premio Planeta 2022
La Manga, 1969. Invierno. Un hotel. Una desaparición. Un arpista y otros empleados que buscan respuestas. Un mundo que nace y otro que se desmorona. Un paseo nostálgico por una tierra desnuda, de arena. Cornicales, posidonia, dunas, gaviotas de Audouin.
El próximo jueves, 14 de diciembre, en la Biblioteca Municipal de la Manga del Mar Menor, David Galindo realizará una presentación de su novela El Arpista, tercera clasificada en el Premio Planeta 2022 y que está ambientada en La Manga de los años sesenta. La presentación del libro y la posterior firma de ejemplares tendrá lugar a las 18.30 horas en la Biblioteca de la Manga del Mar Menor, que forma parte de la Red de Bibliotecas Municipales del Ayuntamiento de Cartagena.
El Arpista, publicada por Cosecha Negra Ediciones, y que está disponible en todas las librerías desde el pasado mes de septiembre, es una obra con una prosa singular, con un halo muy personal gracias al estilo preciosista del autor y a su capacidad para crear atmósferas rodeadas de misterio. Consigue que el lector se implique en la trama desde el primer momento, durante el trayecto de las aventuras de los personajes que viven su particular peripecia en el marco de la Manga del Mar Menor de mediados de los años 60.
Sinopsis de El Arpista
El Arpista acompaña las investigaciones, por parte de un grupo de trabajadores de un hotel de La Manga del Mar Menor a finales de la década de los 60, de una serie de ausencias misteriosas de clientes y de lo que idean para desentrañar los enigmas que se van sucediendo en el lugar. En un orbe desnudo y por fundar, en un paraíso donde no rigen aún las leyes que todo lo codifican y enturbian, confín de la tierra donde todo es viejo y nuevo a un tiempo. Entre ellos destaca un antiguo niño prodigio, un virtuoso del arpa, ya crecido, y con cuya voz se irá refiriendo la historia.
Es una novela de desapariciones, de deserciones y de agonía de mundos que se saben heridos de muerte y ante los que sólo cabe la docilidad, un talante en el que todos están bien entrenados, o la ficción, vereda caprichosa que prefieren explorar y con la que se solazan en los tiempos muertos para escapar de la rutina y del miedo. Paralelamente es una crónica de conflictos internos, de magia, dioses antiguos y música, de payasos muertos y de conspiraciones internacionales que tal vez les alcancen con sus tentáculos. De inocencia y catástrofes. Escrita en ocasiones con prosa nebulosa, a veces honesta, urgente, melosa, pero siempre radiante e intensa que pretende arrullar y agarrarnos por las solapas sin la más mínima consideración en el juego cándido en el que se ve el lector involucrado.