Ante las manifestaciones públicas que ha realizado el solicitante del puesto ambulante para explotar una cantina en los exteriores del campo de fútbol de La Arboleja difundidas a través de redes sociales, el concejal de Urbanismo, Francisco Martínez, hay comparecido ante los medios para aclarar convenientemente el proceso de concesión de la licencia, un acto que es meramente administrativo.

Lo primero que ha querido dejar claro el concejal es que la trabajadora municipal encargada de su tramitación, y que ha sido objeto de ataque por parte del solicitante, ha realizado perfectamente su trabajo, y entiende que "el empresario no ha actuado bien atacando su profesionalidad, y que las prisas que tenga por obtener la licencia no justifican que se cuestione su trabajo, que ha sido en todo momento impecable y conforme a la ley y a los procedimientos establecidos para su concesión".

Entrando en el fondo del asunto, ha informado de que "el solicitante no pagó licencia el pasado año y, a pesar de ello, puso su negocio sin cumplir con la ordenanza de ocupación de vía pública para este tipo de negocios. Para este año, la solicitud la ha presentado muy tarde, por lo que, dado los plazos necesarios para emitir los informes preceptivos, entre ellos el del ingeniero municipal, y tramitar la licencia, el departamento no ha tenido tiempo suficiente para hacerlo antes del comienzo de la temporada deportiva".

Aun así, ha continuado explicando el concejal, "esta persona se puso a vender sin tener la licencia según nos informaron. Cuando vino a recoger la licencia y a pagarla, nos dijo que había pensado que, en vez de anual, la quería trimestral, con lo cual hubo que retrotraer el expediente a su inicio para emitir una licencia trimestral hasta Navidad. Para más inri, cuando ya disponía de esta última, el interesado argumentó que, puesto que había perdido tiempo a principio de temporada y además ahora viene un parón de liga con motivo de las fechas navideñas, no le interesa instalarse".

Concluye el concejal que, además de lo ya explicado, "el trasfondo de todo esto es que el solicitante pretende vender alcohol en este puesto, pero es algo que la ley del deporte prohíbe, como todo el mundo sabe, algo que también se le ha comunicado al interesado, al tratarse de un recinto deportivo, algo perfectamente compatible con que sea una vía pública, puesto que está prestando servicio a estas instalaciones y está en dicho recinto deportivo".

Para terminar, el concejal ha concluido diciendo que "la Administración debe velar por que se cumpla la ley en cualquier circunstancia, y salvando las distancias, los acontecimientos ocurridos recientemente en Murcia así lo corroboran".