José María Ortega, candidato a las elecciones europeas del próximo 25 de mayo por la coalición "La Izquierda Plural", visitó ayer la localidad de Cieza para presentar en ella el programa europeo de su formación, "diseñado con el objetivo de plantar cara a la crisis económica que sufrimos y proporcionar un Estado de Bienestar a la ciudadanía que haga posible que todas las personas tengan una vida digna".
Ortega ha sido concejal en su pueblo natal de Bullas, es licenciado en Psicopedagogía por la Universidad de Jaén y trabaja como técnico en un Equipo de Orientación de la Consejería de Educación. Pertenece a la asociación cinco de junio para la ecología social y la agricultura y ha luchado muy significativamente por un modelo urbanístico sostenible y ajeno a la especulación.
El candidato de la Izquierda plural explicó que "a lo largo de los últimos años, los dos partidos que se han turnado para gobernar en España han tomado decisiones para favorecer y desarrollar una economía especulativa en lugar de una economía productiva, provocando el enriquecimiento sostenido de los grandes empresarios y el empobrecimiento generalizado de la población, a la que se ha castigado, por otra parte, con recortes sanitarios y educativos, despidos, desempleo, abandono de los dependientes, desahucios y otras penalidades que han incidido de forma muy negativa en la calidad de vida de las personas".
También hizo hincapié el candidato de IU en "la pérdida de soberanía y el déficit democrático que supone el modelo actual para la toma de decisiones económicas; la troika dispone en esta materia de espaldas a la ciudadanía, y las medidas se nos presentan como necesarias, como si no hubiese posibilidad de elección, cuando esto no es cierto". Como ejemplo de decisiones antidemocráticas, impuestas desde el exterior y que menoscaban la soberanía de nuestro pueblo, Ortega destacaba "la reforma del art. 135 de la Constitución, acordada por Zapatero y Rajoy a instancias de poderes políticos extranjeros que, a su vez, responden a intereses económicos muy distantes a los de los ciudadanos españoles". Un compromiso de La Izquierda Plural es, sin duda, "regenerar la democracia en España y recuperar espacios de soberanía cedidos, especialmente en el ámbito de la soberanía económica".
Entre las medidas propuestas en esta línea, "que serían perfectamente posibles", Ortega señalaba "una reforma fiscal en profundidad en la línea de que la tributación sea proporcional a la capacidad económica de personas y sociedades, acabar con los paraísos fiscales, y destinar el 2 por 100 del PIB a financiar políticas de estímulo y de creación de empleo", así como "la implantación de un salario mínimo interprofesional equivalente al 60 por 100 del salario medio de cada país, o la realización de una auditoría sobre la deuda, para ver que fracción de la misma es legítima y debe, por tanto, ser pagada".
En el capítulo agrícola, de especial sensibilidad en el municipio de Cieza, Ortega ha abogado por "una reforma intensa de la PAC, donde primen las ayudas a pequeñas empresas familiares sobre las ayudas a los grandes poseedores de tierra". Así, por ejemplo, "el melocotón de Cieza no tiene ayudas de la PAC, cuando su interés social desde el punto de vista del sostenimiento económico y de la creación de empleo es indudable". En el capítulo de la educación, "desde La Izquierda Plural se apuesta por incrementar en un 7 por 100 el presupuesto educativo".
El candidato Ortega finalizó su intervención con una crítica dura al ex Presidente Valcárcel, de quien dijo que "marcha a Europa a buscar una jubilación dorada, dejando la región en un estado caótico respecto al cual se inhibe", y, con carácter más general, a los dos grandes partidos, PP y PSOE, "que carecen de propuestas y que, ante la previsible debacle electoral que puede caerles encima, han diseñado una campaña de baja intensidad para que la abstención sea importante, ya que ello les beneficia".