La Plaza del Castillo se quedó pequeña la noche en que Loli de Gea daba lectura al pregón más emotivo que recuerda la Ciudad de Cehegín, arropado por familiares, amigos y público en general.

Loli de Gea, nadadora con Síndrome de Down que ha dado a Cehegín más de 80 medallas, tocó 'la fibra' a todos los asistentes, a los que hizo derramar más de una lágrima a lo largo de su exposición, sobre todo cuando habló de su padre ya fallecido, a quien dedicó sus más cariñosas palabras.

Estos le cortaban, correspondiéndoles con aplausos interminables, en honor a la primera mujer pregonera de las fiestas de la Virgen de las Maravillas, quien agradecía a sus padres y hermanos todo lo que habían hecho por ella.

"De un patrón diferente, mis padres consiguieron hacer el más bello vestido", aseguraba muy emocionada De Gea, quien tuvo en todo momento la ayuda de su hermana Amparo en un escenario que evocaba la antigua Grecia, cuna de las Olimpiadas.

El alcalde José Soria expresó que "éste es uno de los días más felices de mi vida", tras ver a Loli de Gea de pregonera, "junto a cuando conocí a mi mujer y nacieron mis hijas", añadía el edil.

María Espín y Ana Morales, campeona y subcampeona de España en gimnasia rítmica base, eran las encargadas de portar la antorcha olímpica, que recibía Antonio Jesús Noguerol, miembro de la asociación Murcia Sin Límites, quien encendía el pebetero, convirtiendo este pregón en un alegato a la integración de las personas discapacitadas.

La periodista de la cadena de televisión La 7 Encarna Talavera fue la encargada de presentar esta velada, en la que Alba María del Amor era coronada Reina de las Fiestas 2012. La anterior Reina, Patricia Sánchez, hizo el traspaso de poderes a la actual, encargándose de poner las bandas a toda la Corte Real.

A la nueva Reina le acompañaron las Damas de Honor Yolanda Corbalán, Noelia Giménez, Judit González, Maravillas Mata, Noelia Molina y María del Mar Zamora, quienes se sintieron emocionadas ante tal cantidad de público.

El alcalde y su concejal de Festejos, Rubén Sánchez, le concedieron una placa conmemorativa a la pregonera, con el fin de que nunca olvidara el homenaje tan importante que le hacía su pueblo. Asimismo, la familia de ésta también le regaló un collage de fotografías de su vida, que hizo mucha ilusión a la protagonista de la noche.