El concejal de MC Cartagena, Enrique Pérez Abellán, ha denunciado públicamente la estrategia del Gobierno del Partido Popular en Cartagena, que, según sus palabras, "ha convertido la organización de las juntas vecinales en un tablero de manipulación electoral, olvidando las necesidades reales de los vecinos".

Pérez Abellán ha señalado que el caso de Santa Ana es "el ejemplo más claro de la desvergüenza del PP", ya que se pretende romper una junta activa para crear otra que permita a los populares presidirla. "MC obtuvo un respaldo mayoritario en Santa Ana y Molino Derribao, por lo que, en justicia democrática, debería ser nuestro partido quien presidiera esa junta", indica el concejal cartagenerista. "Pero Arroyo y su equipo prefieren mover piezas como trileros para asegurarse el poder", lamenta.

El edil ha recordado que el Polígono Residencial de Santa Ana pertenece actualmente a la junta de Los Dolores, gracias a la acción de MC, y ha advertido que "trasladarlo ahora a la nueva junta sería un despropósito que trastocaría la composición y dejaría claro que el PP solo piensa en votos, no en vecinos".

En palabras de Pérez Abellán, "en Santa Ana y Molino Derribao los vecinos merecen una junta propia, que funcione cuanto antes y que no esté diseñada para favorecer al PP". "Nuestro compromiso es claro: defender la autonomía vecinal y evitar que el Gobierno siga manejando el municipio como si fuera un tablero electoral", explica.

Por ello, desde MC Cartagena se reclamará en el próximo pleno que se ponga en marcha la Junta Vecinal de Santa Ana de manera inmediata, incluyendo las poblaciones de Santa Ana y Molino Derribao, y manteniendo el Polígono de Santa Ana en la junta de Los Dolores, "porque así ha funcionado este mandato y así debe seguir para garantizar la representación justa de los vecinos", recalca el concejal cartagenerista.

El despropósito en el centro y el Rincón de San Ginés

La denuncia de MC Cartagena no se limita solo a la situación de Santa Ana. Pérez Abellán ha recordado que el gobierno de Arroyo ya ha demostrado su gestión negligente en otros puntos del municipio, con divisiones territoriales que rozan el absurdo. "La separación entre la junta del Casco y la del Ensanche es un esperpento: han llegado a repartirse las aceras del paseo Alfonso XIII sin aclarar a quién corresponden las farolas o la mediana", critica el edil.

El concejal también ha puesto como ejemplo la situación en La Manga y Los Belones, donde la vía rápida se ha convertido en una frontera artificial. "Han dejado a Los Chaparros en Los Belones, mientras que Playa Honda, que está justo al otro lado de la carretera, pertenece a La Manga", explica Pérez Abellán. "Es una incongruencia que demuestra que Arroyo no piensa en la cohesión vecinal, sino en cómo manipular los límites para cuadrar sus cuentas", denuncia.

"Cada división arbitraria es una muestra más de que el PP gobierna con la calculadora electoral en la mano y no con un proyecto de ciudad", dice el edil cartagenerista, quien sentencia: "Cartagena necesita juntas vecinales que respondan a la realidad de los barrios y diputaciones, no a los intereses de un partido".