Tras un esperanzador inicio de partido, en el que el cuadro que dirigen Chema Nicolás y Marcelo Cezarano adquirió un sustanciosa ventaja (0-2), Tenerife Sur reaccionó y consiguió igualar el choque, para derrotar finalmente a los caravaqueños en un emocionante quinto set por 19-17.
Chema Nicolás planteó un partido muy serio, sólido y con la imagen que habitualmente está dando el equipo lejos de casa, manteniéndose dentro del partido y sin dejar que el rival se escapase en el tanteador (8-6; 16-15), para dar un apretón final (17-21) y llegar al final de set con la ventaja necesaria para no sufrir apuros (21-25).
El primer juego dio alas a los visitantes, que jugando con fluidez y soltura sorprendían una y otra vez a Tenerife Sur (6-8; 12-16), incapaz de superar al CV Caravaca Año Santo 2010 (15-21) que se mantenía firme sobre la cancha y sin realizar concesión alguna al rival (18-25).
Cuando todo daba a entender que el tercer parcial se desarrollaría de idéntica manera a los dos anteriores (6-8; 15-16), los hombres de John García Thompson comenzaron a poner contra las cuerdas a los de Chema Nicolás (21-19), que, tal vez pecando de exceso de seguridad, se vieron superados por los tinerfeños, al perder el set por 25-22.
Por desgracia, el CV Caravaca Año Santo 2010 continuó en la insegura línea que había marcado el set anterior y aun cuando llegó con corta ventaja a los tiempos técnicos (6-8; 14-16), nuevamente no supo administrarla, su rival estaba crecido y veía cerca el desempate tras un parcial de 7-1. El cuadro caravaqueño había bajado los brazos demasiado pronto y en esta categoría, los descuidos se pagan muy caros (25-19).
La muerte súbita siempre depara sorpresas y este caso no fue una excepción.Arranca con fuerza Caravaca (3-5), para encajar de nuevo un duro parcial (7-2); la irregularidad está siendo muy grande ante un Tenerife Sur dispuesto a agarrarse a cualquier opción para completar la vuelta al partido, pero los visitante se resisten y de nuevo vuelven al camino de la consistencia infligiendo un parcial de 1-5 al cuadro insular, momento que parece decisivo en el choque. El equipo dispone de un balón de partido con 16-17, pero en el contraataque es incapaz de cerrar el partido, que finalmente se adjudica Tenerife Sur, aprovechando la debilidad caravaqueña, por 19-17.
En síntesis, lo positivo es el punto que se trae para Caravaca de la Cruz el equipo, tras haber jugado dos sets a muy buen nivel, sin hacer concesiones al rival y lonegativo, el exceso de confianza y el no haber sabido acabar el choque cuando el escenario era el idóneo para haberlo conseguido. Es la viva prueba de que en la Superliga de Voleibol Masculina no hay margen para el error y la confianza, siendo imprescindible ganar el último punto antes de que el adversario pueda reaccionar.