Nota remitida por UGT Región de Murcia:
Tan solo seis días después de que los 500 trabajadores y trabajadoras que continúan conformando la plantilla de la conservera Halcón Foods en Campos del Río, iniciaran la noche del pasado martes, 21 de abril, una huelga indefinida para mostrar su rotundo rechazo a la situación de inactividad total que lleva arrastrando la empresa durante más de seis meses, esta mañana la tensión ha vuelto a reinar a las puertas de la fábrica.
A primera hora de la mañana, más de 200 trabajadores de la conservera que llevan padeciendo las consecuencias económicas y morales de estar sin trabajar y sin cobrar más de medio año, se han vuelto a concentrar para impedir, fuera como fuera, que los directivos de Halcón Foods en Campos del Río accedieran al interior de la fábrica sin mediar palabra ni con los trabajadores ni con sus representantes. La desesperación, la rabia y la tensión, les ha llevado a soldar las puertas del almacén para impedir que la mercancía pudiera sacarse y volviera a beneficiar tan sólo a los altos cargos. De esta manera, tal y como explicó el Secretario General de la Federación Agroalimentaria (FTA) de UGT Región de Murcia Jesús Cámara, “están protegiendo sus derechos e intereses, ya que si la mercancía sale de aquí desaparecerá la única opción que estos trabajadores tienen de cobrar las posibles indemnizaciones”.
Nos encontramos ante una descapitalización en toda regla. Halcón Foods arrastra en la actualidad más de cinco millones de euros de pérdidas y además, debe más de 50 millones de euros. Desde el pasado mes de octubre, los trabajadores llevan esperando el momento en que se cierre de una vez por todas ese acuerdo que terminaría con la venta del grupo Halcón Foods a la fábrica murciana Cofrusa, quien se encargaría de tomar las riendas de las dos fábricas que este grupo tiene en la Región, en Campos del Río y Calasparra. Supuestamente, las negociaciones no han dejado de sucederse pero lo único real es la situación de parón total de la fábrica y las lamentables circunstancias de los trabajadores.
Según apuntó Cámara, si se cerrara la venta, “más de 1.000 trabajadores que se encuentran engrosando las listas del paro regional, pasarían a trabajar de nuevo ya que hay que recordar que Halcón Foods ha dado de comer a tres municipios: Campos del Río, Albudeite y Calasparra”. La posición de Cofrusa es muy clara: comprarán Halcón Foods pero al completo, no parte del grupo. Al parecer, el presidente de Halcón Foods, Carlos López, estaría interesado en vender las instalaciones de Campos del Río y Calasparra pero querría quedarse con la fábrica que posee en Perú; razón por la que Cofrusa no termina de dar el paso ya que, de suceder así, Halcón Foods comenzaría a realizar una competencia desleal e incluso a utilizar su propia marca.
El Plan de Viabilidad de la empresa está más que terminado y sobre la mesa del Instituto de Fomento de la Región de Murcia. El Gobierno Regional también ha mostrado su preocupación por la situación de esta empresa pero todavía no hay nada cerrado. Así, la huelga ya iniciada pretende denunciar las condiciones precarias que la mayoría de los trabajadores están viviendo en estos momentos; ya que muchos de ellos se encuentran sin prestaciones por desempleo y se están viendo obligados a recurrir a familiares y amigos para poder subsistir. Y en segundo lugar, denunciar el hecho de que la empresa no ha sido capaz, todavía, de llegar a un acuerdo con las empresas compradoras.
Los trabajadores lo tienen claro y no bajarán la guardia. Alrededor de las 11:00 horas ha acudido a la fábrica el Director de Recursos Humanos de Halcón Foods, Juan Antonio Garralda, quien ha transmitido a Jesús Cámara y a la presidente del comité de empresa, Mari Sales, que “la intención de los directivos es acceder a la empresa para realizar durante dos días el trabajo de un modo normal para así, al tercer día, llegar a un acuerdo”; argumentando, al mismo tiempo, que lo único que querían los directivos era recoger algunos documentos necesarios para llevar a cabo la firma del aucerdo. El rechazo, ha sido rotundo y la presión de los trabajadores ha persistido durante toda la mañana. En este sentido, Cámara afirmó que todo se trata de “un acto de pillería que está llegando ya a extremos insospechables por lo que UGT continuará defendiendo los intereses y el bienestar de toda la plantilla de trabajadores que se están viendo a obligados a emprender acciones como la de esta mañana”.
Unos trabajadores que, por otra parte, han expresado también su malestar con los delegados sindicales de CCOO en Campos del Río. Pancartas con mensajes como “CCOO dimisión” podrían leerse esta mañana a las puertas de la conservera y al preguntar a los trabajadores, todos coincidían en afirmar que se sienten engañados por los delegados de CCOO, quienes no han secundado la huelga ni la protesta.