STERM denuncia que la dejadez de la Consejería de Educación en los centros educativos da como resultado un comienzo de curso sin docentes, sin currículo y sin las condiciones necesarias para trabajar. 

Según ha explicado Juana Navarro, coportavoza de STERM, el instituto Rey Carlos de Águilas empieza las clases con 10 docentes que aún no se han incorporado a su centro y teniendo que organizar a grupos enteros de estudiantes en el patio, porque no hay profesorado suficiente para atender las guardias. 

“Si empezáramos así la noticia, podríamos estar hablando de cualquier centro de la Región. También empiezan trabajando con borradores de los currículos de las materias de los cursos impares de ESO y Bachillerato. Nuestra región es una de las siete Comunidades Autónomas que no han publicado los decretos de adaptación a la nueva ley educativa”, informan desde el sindicato asambleario.

Pero es que, además, empiezan el curso dependiendo de un grupo electrógeno mientras la Consejería le da solución a un problema eléctrico que viene de lejos. El 8 de junio el viejo transformador del centro, que había quedado obsoleto años atrás, se quemó. La Consejería reaccionó una semana después, en plena ola de calor. “Desde finales del curso pasado se está trabajando con un grupo electrógeno provisional, cuyos gastos de combustible han tenido que ser abonados por el propio centro hasta recibir fondos adicionales para poder hacer frente a las dos primeras facturas”.

El ruido es constante desde las ocho y media de la mañana, avisa Juana Navarro. El centro oferta horario de mañana y de tarde para ESO , Bachillerato y FPB, y de tarde/noche para adultos, de manera que hasta las diez y media de la noche el grupo electrógeno tiene que permanecer encendido, con las consiguientes molestias para el vecindario y para las actividades de estudio. Familias y estudiantes ya han mostrado su descontento ante una situación que debería haberse evitado.

El centro cuenta también con FP de Cocina, pero los refrigeradores no se pueden quedar encendidos por la noche. Según ha explicado el equipo directivo del centro a STERM, han tenido que “adaptar toda la manipulación de alimentos a productos que no haya que conservar”.

Desde STERM denuncian el abandono y dejadez de Consejería para con los centros públicos, sus trabajadoras y trabajadores, y toda la comunidad educativa en la Región de Murcia. El sindicato asambleario reclama a la Consejería una planificación educativa que garantice el mantenimiento y sostenimiento de los centros públicos y sus infraestructuras, así como su adaptación al cambio climático, aportando fondos propios para complementar el plan de climatización ministerial.